Otra vez sopa. Una nueva fiesta clandestina acaba de salir a la luz, en medio de una pandemia que prohíbe la realización de fiestas y eventos masivos.
En esta oportunidad, las autoridades de Mendoza detectaron una fiesta clandestina en la zona de Agua de la Avispas, pasando Potrerillos.
Hasta allí, más precisamente en el puesto Mariño, asistieron unas 600 personas. El evento, que se desarrolló el sábado por la noche, contaba con DJ y un sinfín de bebidas alcoholicas, según revela diario Jornada.
Fue la propia dueña del puesto Mariño quien dio aviso a las autoridades y radicó la denuncia en la Comisaría de Potrerillos. Según indicó, es la tercera vez que le usurpan parte de su propiedad para armar una fiesta.
Cuando la Policía llegó al lugar detectaron que había DJ, varias camionetas, y estaba todo armado para continuar este domingo.
Pese a la cantidad de asistenes, sólo hubo algunas aprehensiones y las actuaciones estuvieron en manos de la Oficina Fiscal Nº11.
