La novela en torno a la concesión de Portezuelo del Viento sigue dando que hablar. Este martes, el senador Alfredo Cornejo dijo que el proyecto “está en suspenso, no cancelado”.
En diálogo con Rado Nihuil, el ex gobernador de Mendoza respaldó las gestiones que está llevando a cabo Rodolfo Suarez ante el Gobierno Nacional.
Cabe aclarar que el próximo viernes, el jefe de Estado debe dar su postura a favor o en contra de Mendoza, para la realización de la obra.
Ver: Portezuelo del Viento: ¿guiño de Alberto Fernández o más de lo mismo?
Si bien hay muchos actores políticos y empresariales que ejercen presión para que la represa se realice, hay dirigentes que han tildado de obsoleta la obra en la actualidad.
Cornejo se refirió a esas expresiones opositoras al Gobierno de Mendoza, y señaló: “Es probable, no hay que descartar nada. Hay planes B que podrían ser plan A”.
De este modo, el radical dio el visto bueno a las obras hídricas que podría llegar a realizar Mendoza, utilizando los 1.023 millones de dólares que Nación le debe a la provincia.
Su respuesta a Sanz
En las últimas horas, el radical sanrafaelino Ernesto Sanz, fue durísimo con el Gobierno de Suarez respecto del avance del proyecto.
“Estoy indignado con Mendoza, con la dirigencia política de Mendoza, en general”, dijo uno de los fundadores de Cambiemos.
Cornejo, en defensa del actual mandatario mendocino, le respondió al sureño y le tiró algunos palos.
“Yo, en el caso de Ernesto, pondría más energía en pedirle a Alberto Fernández y a la dirigencia kirchnerista mendocina que saquen el laudo. ¿Qué responsabilidad tiene Suarez? Al contrario, Suarez nunca paró de trabajar en Portezuelo del Viento”, señaló.
Y, además, explicó que “Portezuelo del Viento está en suspenso porque objetivamente no se puede adjudicar sin impacto ambiental aprobado, no está cancelado”.
El ex gobernador le tiró la pelota al Gobierno nacional, y dijo que esa administración fue la “que generó el conflicto”, del que también son parte los gobiernos de La Pampa, Río Negro, Buenos Aires y Neuquén.