Ni bien se conoció la nueva suba de tasas, el Banco Central obligó a las entidades a pagar el 41,5% de Tasas Nominal Anual (TNA) por los plazos fijos a 30 días, lo que lo lleva a convertirlo en una Tasa Efectiva Anual (TEA) del 50,4% si se reinvierten los intereses que se obtienen cada 30 días.
Sin embargo, el BCRA no cambió la tasa de revolving, como se denomina en la jerga a la financiación que los bancos cobran a los usuarios por pagar fuera de término el resumen de la tarjeta, que queda en una tasa del 49%, después de haberse elevado en enero con la primera suba de tasas del año, cuando estaba en el 43%.
AHORA 12
Por este motivo, para las entidades resulta cada vez menos conveniente el negocio de las tarjetas, que empeora aún más en el caso del Ahora 12, que tiene una tasa nominal anual del 31%, cuando deben pagar a los ahorristas 41,5% por sus depósitos.
SIN CUPO
Algo parecido sucederá con el sector financiero, que ya se estuvo viendo, pero ahora se incrementará: clientes de bancos de primera línea que van a comprar un producto en cuotas y en la caja lo rebotan porque “ya no tienen cupo”.
Cuando van al banco ven que, en realidad, les bajaron el límite crediticio para la compra en cuotas. En otros casos, para quienes tienen más suerte, no se lo actualizan desde hace dos años, con lo cual pierden ante el avance de la inflación del 50% anual.
PARA VIP
En algunos casos, sólo a aquellos clientes Premium o VIP le actualizan en forma automática los límites para la compra con tarjeta, pero en un pago, y no en cuotas, para evitar el Ahora 12 con la tasa subsidiada del 31 por ciento.
Tal cual reflejó Cronista, es el cliente, quien debe ir a pelearse con el banco para que le suban el límite de compras, pero debe subrayar que quiere la actualización del límite para poder comprar en cuotas, no en un pago.
Esta es la razón por la cual los consumos con tarjeta de crédito caen un 12%. De todos modos, hay que tener en cuenta los costos ocultos a la hora de pagar en cuotas por fuera del Ahora 12, porque es cada vez más caro.