El PRO de Omar De Marchi vuelve a estar en el centro de la escena, aunque ahora vuelve a dar que hablar por el alejamiento de Carolina Luna, una reconocida dirigente de esa fuerza en Maipú.
“Quienes se atribuyen las decisiones partidarias en Mendoza no pueden arrastrar a todo el partido que supimos forjar y sostener. Todo por el capricho de un dirigente“, sostuvo Luna.
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La dirigente, que además es conocida por su labor como contadora pública, le apuntó al lujanino por abrir un juego funcional a Matías Stevanato y a favor del kirchnerismo. “Ese es mi límite y el de muchos más”, subrayó.
Luna, hasta poco, integraba el equipo del senador provincial Valentín González, uno de los tantos dirigentes que continúan respondiéndo a De Marchi y a Álvaro Martínez.
El alejamiento de la contadora se suma al de la edil Sol Salinas, el diputado Enrique Thomas y la concejal de Luján de Cuyo, Cecilia Páez.
Según manifestó la propia Luna, la conducción del PRO “tiene cautivo al partido como herramienta de meras especulaciones personales de un dirigente en particular”.
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Al igual que los dirigentes que se alejaron del legislador nacional, aseguró que “es necesaria y urgente” la unidad del Frente Cambia Mendoza para kirchnerismoa “Debemos dar certidumbre y respuesta claras a los mendocinos de esos municipios”, señaló.
Y se mostró preocupada por el pedido que le han hecho numerosos militantes y referentes del PRO, que vienen manifestando desde el año pasado que “la competencia debe ser por dentro del frente para fortalecer la propuesta ante al adversario común, que es hoy el kirchnerismo, cuyo desmanejo nacional tiene en vilo a la toda la sociedad”.
La joven comentó que se esperanzó con la disposición de dar libertad para integrar los frentes en las elecciones desdobladas. Sin embargo, expresó su malestar ya que “pronto se visibilizó que esto era una farsa y que no había ninguna voluntad de negociación ni integración”.
