En medio de un clima tenso, marcado por la fuerte interna que sacude al PRO, la Mesa Nacional de Juntos por el Cambio mantuvo una importante reunión durante la tarde del miércoles en Palermo.
Tras el conclave, algunos de los presentes manifestaron que hubo acuerdo total en sostener “la unidad” del espacio para intentar derrotar al kirchnerismo.
Lo que todavía no quedó claro, es como estarán conformadas las diferentes listas del frente, tal cual reflejó NA.
La discusión sobre si acordar listas de unidad en los principales distritos o bien organizar una competencia interna en el marco de las PASO no quedó saldada, aunque sí se resolvió mantener el sello de Juntos por el Cambio sin cambios, ya que se trata de una marca ya instalada y conocida por la sociedad.
“Vamos a trabajar para tener una sola lista y si tenemos una PASO para aumentar el volumen político, lo vemos con agrado para enfrentar al kirchnerismo”, dijo el jefe del bloque del PRO en Diputados, Cristian Ritondo, que fue el encargado de brindar detalles del encuentro ante la ausencia de la presidencia partidaria, Patricia Bullrich, por motivos personales.
La reunión, llevada a cabo en Galpón de los Milagros, contó con la presencia del ex presidente Mauricio Macri, el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, al presidente de la Unión Cívica Radical, Alfredo Cornejo, y al referente del Peronismo Republicano Miguel Ángel Pichetto.
Además de la ausencia de Bullrich, otra dirigente que no asistió fue María Eugenia Vidal, que por estas horas está cumpliendo la cuarentena obligatoria luego de haber viajado a Estados Unidos.
Sí participaron el gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, el mencionado Ritondo; el presidente del interbloque en el Senado, Humberto Schiavoni; los titulares de los interbloques de diputados de Juntos por el Cambio, Mario Negri, y de senadores, Luis Naidenoff; el senador Martín Lousteau; y los representantes de la Coalición Cívica Maximiliano Ferraro, Juan Manuel López y Maricel Etchecoin.
A diferencia de reuniones anteriores, estuvo el intendente de Vicente López y el presidente del PRO bonaerense, Jorge Macri, y su par de la UCR, Maximiliano Abad.
Claramente sus incorporaciones deben leerse en el marco de la discusión electoral, ya que por un lado Jorge Macri buscaría competir en las PASO con el larretista Diego Santilli, mientras que la presencia de Abad se explica por la probable candidatura de Facundo Manes en la misma interna, en representación del radicalismo.
Durante el encuentro hicieron un análisis de coyuntura y, según confirmaron fuentes que participaron del encuentro, decidieron no innovar respecto al nombre de la alianza política, una posibilidad que se venía barajando.
“En principio estamos ratificando el mismo nombre. La provincia de Buenos Aires para nosotros es muy relevante. Esta elección es clave para el equilibrio de poder, se juega que el oficialismo tenga mayoría en ambas cámaras”, advirtió Cornejo.
Además, los dirigentes llegaron al acuerdo de que el piso de votos para integrar la lista en caso de que haya competencia en las PASO, se definirá en cada distrito y, de acuerdo a las fuentes consultadas, también se analizó la posibilidad de sancionar a un partido que integre la coalición pero decida competir por afuera en alguna región del país: no se descarta en ese caso ir por el lado de la intervención.
En medio de las especulaciones sobre cómo se organizará la oferta electoral de Juntos por el Cambio en la provincia de Buenos Aires, el distrito que reparte mayor cantidad de bancas en el Congreso, el presidente del radicalismo no descartó la posibilidad de una competencia interna entre Santilli y Manes, sin referirse a Jorge Macri, otro de los que podría aparecer entre los aspirantes.
“Nosotros creemos que si hay lista de unidad bienvenido sea, pero si hay competencia y es entre buenos candidatos tampoco lo vemos mal. Una interna entre Manes y Santilli sería muy provechosa para nuestra coalición, como también sería muy provechosa una lista de unidad”, manifestó.
Por su parte, Ferraro -presidente de la Coalición Cívica señaló que durante la reunión se hizo mucho hincapié en “garantizar la unidad de Juntos por el Cambio”, a la vez que minimizó la disputa por los liderazgos dentro de la coalición al sostener que en una elección de medio término “lo que se juega es generar los frenos necesarios al oficialismo”.
“Lo que se juega acá es una elección de medio término, de poder generar los frenos necesarios al oficialismo, y el primer paso para la construcción de una alternancia y una alternativa en 2023. Hoy estamos abocados en la unidad de Juntos por el Cambio“, insistió.