El pasado 11 de octubre, el intendente malargüino Juan Manuel Ojeda y su esposa, la senadora radical Jésica Laferte, presentaron el proyecto de ley de zonificación minera.
La polémica iniciativa, que implica la explotación minera en algunos puntos del sur provincial con químicos prohibidos por la Ley 7722, inmediatamente removió las aguas y diferentes ambientalistas comenzaron a movilizarse.
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El otro que se movió bastante rápido es el gobernador Rodolfo Suarez, que le bajó el pulgar al proyecto de Ojeda: “Avanzar en un debate en este momento no lo creo oportuno, más allá que entiendo las razones valederas y ciertas del intendente que está peleando por su pueblo y por lo que cree”, dijo mientras participaba de la entrega de diplomas del Programa Mendoza Citi 2022 en la Nave Cultural.
La postura inflexible de Suarez, como era de esperarse, no cayó de la mejor forma en Malargüe, y fue el propio Ojeda el que le mandó un fuerte mensaje al mandatario provincial: “No hay nada más peligroso que la pobreza. Si no es peligroso esto, que alguien me explique qué es”.
Luego de esas declaraciones de unos y otros, hubo movilizaciones por parte de ambos bandos: los que se oponen a la explotación minera, y los que se han cansado de elevar la voz y de pedir de una vez por todas que les permitan este tipo de explotación en Malargüe.
Es más, en la última protesta en favor de la minería, los sureños elevaron un petitorio solicitando “urgente” un debate en “la casa de las leyes de la presentación realizada a la legislatura, donde solicitamos la zonificación minera en el departamento de Malargüe”.
“Exigimos que no se nos siga negando el derecho al trabajo genuino. No queremos subsidios, queremos ser generadores de fuentes de trabajo con la Minería y cambiar la matriz productiva no solo de Malargüe sino de Mendoza”, añadieron.
Y pidieron que “se arbitren los medios necesarios para colocar rápidamente en debate ante la casa de las leyes de comenzar la actividad minera, y zonificar a Malargüe de los alcances de la ley 7722“.
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Y cuando muchos daban por sepultado este tema, por lo menos en lo que resta del año, un llamado en el sur provincial trajo cierto optimismo.
Anoche, un grupo de legisladores mendocinos se comunicó con algunas de las agrupaciones que viene insistiendo con la minería, entre las que se destaca la propia comuna, la Unión Obrera de la Construcción de la República Argentina (Uocra) y la Cámara de Productores y Proveedores Mineros de Malargüe (Capromin), y les solicitaron una reunión urgente “para tratar el petitorio entregado y la zonificación minera de Malargüe”.
El conclave se llevará a cabo durante la mañana de este miércoles en el Senado de la provincia de Mendoza.
Si bien es simplemente la convocatoria a una reunión, el llamado de los legisladores sorprendió a más de un sureño.
