La socia mendocina de Cristina Fernández de Kirchner, la senadora Anabel Fernández Sagasti, pretende avanzar con el tratamiento de un proyecto de ley que busca establecer la falta de perspectiba de género y la utilización de “discursos de odio” como causal para recusar jueces.
El año pasado Fernández Sagasti presentó la iniciativa, pero días atrás fue incluida para ser debatida en la Comisión de Justicia de la Cámara alta, mañana a partir de las 16:00.
En el arco opositor han optado por hacer silencio, aunque se sabe que ven en el proyecto un Caballo de Troya que posibilitaría para que Cristina Kirchner tenga una herramienta más para desplazar a los jueces que no son de su agrado en las causas por corrupción en las que se ve involucrada.
El proyecto modifica tres leyes, entre las que se destacan los códigos procesal federal y nacional, y la ley de protección integral para erradicar la violencia contra las mujeres. En todos los casos, se determina una específica nueva causal para la recusación de magistrados.
“Si manifiesta judicial o extrajudicialmente una posición contraria a la perspectiva de géneros, hostilidad hacia las mujeres y población LGBTIQ+, utiliza discursos de odio, o no respeta y hace respetar la ley de identidad de género”, se lee en el artículo uno del proyecto como causal de recusación, modificando el artículo 55 Código Procesal Penal de la Nación. El mismo proyecto, pero en el artículo dos, se observa que apuntan a la modificación del artículo 60 del Código Procesal Penal Federal.
El tema causó cierto malestar en la oposición, y en Juntos por el Cambio (JxC) sospechan que se trata de una jugada de Cristina Fernández de Kirchner, para conseguir jueces y tribunales de su gusto.