El Gobierno nacional anunció la convocatoria a sesiones extraordinarias entre el 20 de enero y el 21 de febrero, con un temario que incluye proyectos de alto impacto político y social. Entre las iniciativas más relevantes figuran la reforma electoral para eliminar las elecciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO), la ley Antimafia, una reforma del Código Penal para evitar la “puerta giratoria” de los delincuentes y el proyecto de Juicio en Ausencia.
El jefe de Gabinete, Guillermo Francos, ya había adelantado la intención del Poder Ejecutivo de sesionar durante el verano, con el foco puesto en la eliminación de las PASO. Este cambio busca redefinir el esquema electoral de cara a las elecciones de renovación parlamentaria previstas para octubre. Sin embargo, para concretarlo, el oficialismo deberá enhebrar acuerdos con los bloques opositores, ya que no cuenta con mayoría propia en el Congreso.
Además de la reforma electoral, el temario incluye una nueva propuesta sobre Ficha Limpia, que apunta a prohibir que personas con condenas firmes puedan acceder a cargos públicos, y un paquete de medidas sobre seguridad, donde destaca la ley Antimafia, que ya cuenta con la aprobación de la Cámara de Diputados y dictamen favorable en el Senado. Esta normativa tiene como objetivo combatir el crimen organizado y fortalecer las herramientas para su desarticulación.
Otro punto relevante es la reforma del Código Procesal Penal, que incluiría la regulación del Juicio en Ausencia para casos específicos. Este mecanismo permitiría avanzar con juicios a imputados que no estén presentes físicamente, una medida que genera debate en términos de garantías procesales.
Ver: Interna liberal en Mendoza: los libertarios blue que se despegaron de Milei y bancan a Villarruel
Sin embargo, la eliminación de las PASO se posiciona como la prioridad máxima del oficialismo. Este cambio busca modificar las reglas de juego electoral para implementar el nuevo esquema en las elecciones legislativas de este año.
A pesar de las resistencias, el Gobierno confía en que el amplio temario de sesiones extraordinarias permitirá abrir espacios de diálogo para negociar con la oposición y lograr consensos mínimos que viabilicen las propuestas.
