El Instituto Malbrán confirmó el primer caso de una persona que fue diagnosticada con la enfermedad COVID-19 causada por la subvariante de Ómicron BA.5, en una persona que había regresado de un viaje internacional.
Este primer caso fue detectado durante el análisis de las muestras ingresadas entre el 5 y el 11 de junio, cuyos resultados son los últimos publicados oficialmente. Pero, según pudo saber Infobae, la secuenciación de muestras posteriores a esa fecha —cuyos informes aún no fueron difundidos— constató que un 5% de las pruebas ya correspondían a BA.5.
Hasta ahora, tanto el Instituto ANLIS/Malbrán, dependiente del Ministerio de Salud de la Nación, y el Proyecto País, la iniciativa de vigilancia genómica del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación de la Nación, no habían reportado la identificación de muestras de pacientes con la subvariante Ómicron BA.5. Lo que sí se había detectado antes era la otra subvariante cercana, Ómicron BA.4. Tanto BA.5 como BA.4 son motivo de preocupación mundial porque han aumentado su frecuencia en los casos de personas con la infección en todo el mundo y están impulsando nuevas olas.
El avance de BA.4 y BA.5 sobre la subvariante BA.2 -que predominó en el mundo entre enero y abril- muestra que ya a fines de mayo, la segunda prevalecía en Portugal. Para fines de junio, BA.4 y BA.5 juntos se habían convertido en variantes dominantes en el Reino Unido y Alemania.
Estas subvariantes BA.4 y BA.5 de ómicron parecen no tener resistencia de los anticuerpos tanto entre las personas que han tenido una infección previa por covid-19 como entre las que se han vacunado completamente, según nuevos datos de investigadores del Centro Médico Beth Israel Deaconess, de la Facultad de Medicina de Harvard.
Fuente: Infobae