El juicio por la Causa Vialidad donde Cristina Fernández de Kirchner está acusada de corrupción está por llegar a su fin. Faltan un poco más de 24 horas para que se conozca el veredicto final.
De todas formas, la vicepresidenta dijo que “obviamente habrá una condena”. Además se defendió y afirmó que “todo lo dicho es mentira” y que sus garantías constitucionales fueron violadas. Negó ser la socia de Lázaro Báez.
“Cuando se violan todas las garantías, cuando el juez dijo una cosa y hoy dice otra en base a una denuncia que hizo el Gobierno de Macri, obviamente habrá una condena”, expresó en diálogo con un medio brasileño y de paso se comparó con Lula Da Silva.
Sobre el juez federal a cargo de la investigación Julián Ercolini dijo: “Es el mismo que hace siete u ocho años, ante las mismas acusaciones de la oposición, dijo que no era competente y envió el caso al sur del país”. “La Justicia de Santa Cruz investigó y hubo sobreseimiento. Ese proceso involucró al mismo empresario y exactamente a las mismas 51 obras que ahora se investigan nuevamente”.
Si destacó que cuando terminó su mandato como presidenta de Argentina tenía “los mismos bienes por los que ya había sido investigada tres veces”. Y sostuvo: “Cuando dejé la Presidencia volví a la misma casa donde vivía antes”.
Cristina asegura que a lo largo de este juicio se construyó “la imagen de un ladrón”. “Solo le temo a Dios. Durante cuatro años, mucho tiempo, vienen hostigándome, estigmatizándome”, expresó.