El ministro de Seguridad, Aníbal Fernández, intentó despejar dudas sobre las internas en el Frente de Todos y justificó “discutir a los gritos” , como método de fijar posiciones y defender argumentos al interior del oficialismo.
El reconocido ex funcionario kirchnerista se hizo cargo de un puesto de alta exposición pública con el mismo tono de los mejores años de Néstor y Cristina Kirchner dejando títulos, defendiendo a su espacio y cruzándose con quien lo ataque.
En el programa Hagan Algo, por C5N, habló sobre las diferencias entre Alberto Fernández y Cristina Fernández de Kirchner, e intentó bajarla temperatura del conflicto, aunque aclaró que para hacer política hay que defender fuertemente las posturas.
“Si hay que discutir a los gritos, se hace, esto no es para cagones”, sostuvo el funcionario que lidera la cartera de Seguridad.
Después recordó su paso por el gabinete del ex presidente Néstor Kirchner y dijo que los enfrentamientos verbales por posiciones diferentes eran moneda corriente.
“No tengo preocupaciones de lo que sucedió. Si hay una discusión, hay que discutir en serio. Si hay que discutir a los gritos, se hace, como lo hice cientos de veces con el mismísimo Néstor Kirchner, a quien he amado profundamente. ¿Por qué no puedo discutir?”, señaló el ex jefe de Gabinete.
También manifestó que tensar la cuerda era, uno de las causas por las cuales lo convocaron como funcionario en el primer mandato kirchnerista: “Si a los 50 años llegué a ser ministro del Interior de Néstor Kirchner, ¿me voy a callar la boca con el mismo Néstor Kirchner? Ni en pedo. Yo estoy para discutir, porque ahí me pusieron ellos, yo no fui a buscarlo, me pusieron para hacer eso”, remarcó.
Después, señaló que la discusión de fondo del actual Frente de Todos tiene como finalidad “defender los intereses de un pueblo que está esperando resolver sus situaciones”.
“Todo el mundo se comió el amague y se arrastró la marca hacia la discusión que se había dado”, continuó, y agregó que la importancia en los intereses de la sociedad “se está discutiendo en el más alto de los sentidos, porque el objetivo que se persigue es muy alto”.
También expresó que “esa es la pelea, defender los intereses de un pueblo que está esperando resolver sus situaciones”.
Por último, Fernández volvió a subir el tono: “Esto no es semántico, es de fondo: se discuten los intereses del pueblo, pero esto no es para cagones, eh. Poner un salame que diga ‘yo quiero hacer tal cosa’, ‘no vamos a hacer todo lo contrario’. No me callo la boca con nadie”.
