Las viejas modas siempre vuelven, lo “vintage” no pierde su encanto. Los discos de vinilo, para muchos parte del pasado, han revivido en los últimos años y tienen muchos fanáticos. Un día como hoy pero hace diecinueve años, un par de melómanos amantes de ese formato decidieron honrarlo y desde entonces cada 12 de agosto se conmemora el Día Internacional del Disco de Vinilo.
Para “preservar el patrimonio musical del pasado”, un grupo de personas en el estado de California tuvo la iniciativa de instaurar una fecha que homenajeara los discos de vinilo. Si bien no hay “historia oficial”, el boca a boca asegura que la fecha calendario fue elegida por ser el aniversario de la invención del fonógrafo, creado el 12 de agosto de 1877 por Thomas Alva Edison. Dos por uno: de esta manera, también le rindieron homenaje al inventor.
En la primera celebración, cada uno de los jóvenes llevó su colección de discos y realizaron una fiesta. En el lugar sonaron diferentes ritmos y cantantes, desde Elvis y los Beatles hasta blues. No importaba la elección de las piezas musicales que se reproducían, sino que el motivo de reunión era venerar a aquel gran LP que fue perdiendo de a poco su reinado ante la la aparición de otros formatos.
En la década del 90, el CD le quitó protagonismo a la joya que defendían los californianos. Pero la fama le duró poco, estos también han pasado a la historia así como lo hizo el cassette. Por supuesto, nadie descarta que en algún momento vuelvan a estar de moda, de hecho, en la actualidad, los vinilos son tendencia nuevamente y todos mueren por comprar un reproductor con sus respectivas piezas.
Para los que añoran los vinilos, ya se sabe: cada año se celebra este día y hay sitios en los que se realizan fiestas, eventos y congregaciones donde los fanáticos de este formato se encuentran, escuchan música y hasta intercambian sus posesiones. En Soho, Reino Unido, existe una de los mayores encuentros de tiendas de discos de vinilo donde llevan a cabo un festival de música gratuito, cuyo DJ no es otro que los mismos vinilos.
TODO VUELVE
Tras años de decadencia, los vinilos han tenido un resurgir apoteósico durante los últimos cinco años, incluso superando la venta de discos en formato digital. No obstante, el CD sigue siendo la opción física preferida para la mayoría de público. De hecho, según la industria musical, el volumen de negocio actual de los discos de vinilo es casi idéntico al que había en los años 80 y suponen un tercio de la compra física musical. Y es que, en la actualidad, los puedes encontrar a la venta en grandes superficies, tiendas especializadas, ferias de coleccionistas o a través de Internet.
La venta de vinilos aumentó un 108% en el último año según reportes oficiales
Causas del auge del vinilo
Obviamente, los vinilos están de moda. El fenómeno fan ha hecho que el merchandising sea una de las fuentes de ingresos más importantes para los artistas y la industria ha aprovechado para sacar a la venta LP’s creando tendencia de una manera u otra. Además, vivir la experiencia de sentarse y escuchar un disco de vinilo en un tocadiscos no tiene precio. Es una vivencia única, aunque algunos ven en esto un postureo puro y duro.
Además de ser una tendencia, el vinilo ofrece una calidad de sonido natural y sin editar con el que se permite notar matices insuperables que en formatos digitales más editados y comprimidos no son perceptibles. Esto ha atraído a un nuevo público que ha empezado a consumir este tipo de música. También están los que por recuerdos de infancia o adolescencia o por pura nostalgia, es decir, aquellos que por edad consumieron estos vinilos en los años 80, siguen haciéndolo ahora.
También hay mucha gente que, por su belleza y su autenticidad, convierte al disco de vinilo en un auténtico objeto de coleccionismo, que incluso pueden llegar a tener un valor material incalculable. De hecho, hay tiendas de coleccionismo y ferias donde se pueden encontrar oportunidades, discos descatalogadas o rarezas difíciles de encontrar. Al fin y al cabo, joyas con un valor sentimental o monetario difícil de estimar.