Se complicó el uso de las vacunas que donó Estados Unidos, y Alberto Fernández busca una solución urgente

Desde la Casa Blanca anunciarán una nueva cesión a nivel global, aunque al no registrarse acuerdos legales con Pfizer, Modern y Janssen complican el acceso a las dosis destinadas a Argentina.

El presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, se comunicó con su par argentino, Alberto Fernández, a quien le informó que Argentina recibirá millones de vacunas contra el Covid-19, las cuales se almacenan en el país norteamericano.

El gesto que tuvo el mandatario estadounidense no es menor, ya que determinó la cantidad de dosis, luego de analizar la cantidad de contagios diarios que registra nuestro país.

Las vacunas que destinará Biden a la Argentina fueron fabricadas por Pfizer, Moderna, Jenssen y AstraZeneca. El Presidente de los Estados Unidos no es la primera vez que realiza un gesto humanitario de este tipo, en medio de un contexto adverso por el avance de la pandemia a nivel mundial.

De hecho, y según consignó Infobae, también considera necesario ese ejercicio básico de softpower para evitar que China y Rusia avancen en las áreas de influencia asignadas luego de la Segunda Guerra Mundial.

El presidente argentino se mostró agradecido por la gestión de su par de los Estados Unidos, y reconoció desde Olivos que Argentina podrá acceder sin inconvenientes a los millones de vacunas que destinó la Casa Blanca.

Igualmente, y a pesar de llevar un mensaje tranquilizador, Fernández le pidió a Carla Vizzotti que busque una solución jurídica urgente que preserve los intereses del país y satisfaga las precauciones legales sugeridas por las firmas farmacéuticas de Estados Unidos.

Hasta noche, la ministra de Salud seguía negociando con los laboratorios extranjeros. Durante las últimas horas se conoció que no habrá solución jurídica antes que Biden anuncie la donación de las millones de dosis que le corresponderán a la Argentina.

Argentina no se demorará con las aprobaciones de la ANMAT, siempre y cuando termine de aprobar la eficacia de las vacunas producidas por Moderna y Jenssen (un producto de Johnson and Johnson). La situación se complica para la Casa Rosada en lo referido a la negociación de los contratos legales con las empresas farmacéuticas de los Estados Unidos.

Jenssen y Moderna pretenden ciertas cláusulas de indemnidad que no encajan con los tipos jurídicos previstos en el Código Penal Argentino. Vizzotti y su equipo de abogados negocia en la primera línea, y detrás de ella se encuentran Alberto Fernández y su secretaria Legal y Técnica, Vilma Ibarra.

La Casa Blanca prepara su anuncio de una nueva donación global para los próximos días, si Biden no cambia su postura. La distribución se hará por medio del mecanismo COVAX y de Estado a Estado.

Alberto Fernández sabe de esta información, y espera conocer el número exacto de dosis que se recibirá en Argentina. Ese cantidad responderá a las estadísticas en cuanto a nuevos contagiados en el país y se cuida como un secreto político. El Presidente ya sabe que la lista de beneficiarios en América Latina estará encabezada por México, Brasil y Argentina.

Negociaciones

  • Pfizer: La negociación es lenta y trabada. Tiene autorización de la ANMAT.
  • Jenssen: La negociación está avanzada. Y también abrió un trámite en la ANMAT.
  • Moderna: La negociación se extenderá en el tiempo. Aún no se presentó en la ANMAT. Pero tiene la ventaja de haber sido autorizada por las autoridades de los Estados Unidos (FDA).

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