No bien iniciado el 2021, las bodegas ya tienen un marco de lo que será la situación para este año marcado por la reducción de las expectativas frente a la crisis económica y la pandemia del coronavirus.
Más allá de tener que moverse en un acontecimiento adverso, las bodegas deberán adaptarse a un modelo de negocios centrado en atender los hábitos de los consumidores. “No alcanza con ofrecer buenos productos. Los consumidores buscan más valor en la experiencia de compra”, aseveran.
“hay alta probabilidad de caída de la demanda”, estipulan los bodegueros y auguran que por el tipo de cambio se “seguirá estimulando la exportación, aunque en un mercado mundial que se recuperará muy lentamente”.
“Reflexiones para proyectar el 2021 de los vinos argentinos”, se titula un informe que muestra las expectativas de las empresas del rubro vitivinícola y que fue elaborado por el Centro de Estudios Económicos de Bodegas de Argentina, la cual tiene bajo su órbita a más de 250 bodegas nacionales y extranjeras en todo el territorio argentino y que fue publicado por Ámbito.
“Los salarios tienen una tendencia a caer lo cual es una gran amenaza al consumo doméstico. Cuando la inflación supera el 26% anual es altamente probable que los salarios se deterioren y esto impacta directamente en la demanda de vinos. La proyección de inflación para 2021 está sustancialmente por encima” de este número, remarca el paper.
Asimismo señala que “a pesar de que se espera un crecimiento del PBI del 4% al 5%, los niveles de empleo serán difíciles de recuperar”. En ese sentido, es que “por el lado de la demanda de vino hay alta probabilidad de caída”.
“Se espera que el tipo de cambio se mantenga en valores similares o más elevados que el promedio del año 2020, lo cual augura una ventana de oportunidad para la exportación”, añade el estudio.
No obstante, se menciona que el dólar no será el único factor que influya en las exportaciones. “El comercio mundial de vinos se recuperará, pero muy lentamente”, señala, agregando que “se mantendrá una elevada rivalidad competitiva y crecer en share será complicado”.
También indica que el año pasado “se abrieron oportunidades que habrá que explotar (Reino Unido, Estados Unidos y China) en 2021”, ya que “los excedentes financieros de exportación no alcanzarán a compensar los desfasajes del mercado interno”.
“Muchos cambios acelerados por la pandemia se mantendrán y exigen ajustes sustanciales en la gestión. La demanda por productos y servicios sustentables crecerá y será decisiva en un mercado de gran oferta. Gran cantidad de empresas deberán profesionalizar la gestión y adaptarla a un nuevo ambiente”, destaca el informe.
Por último menciona que “la pandemia extendió los alcances del comercio electrónico. Y hasta los competidores más chicos aceleraron la venta directa. Esto hacer crecer la exigencia de contar con una logística de alta calidad. El abastecimiento de materia prima será central en la competitividad del negocio”.