Aún no pasaron ni 48 horas del entierro de Diego Armando Maradona, fallecido a los 60 años el miércoles pasado de un paro cardiorrespiratorio, y ya Santiago Lara solicitó que se exhume el cuerpo del diez para, mediante pruebas de ADN, poder determinar si es hijo del Ídolo popular.
“Acá hay un chico que se queda colgado sin saber quién es” expresó ante la justicia el letrado del hombre, José Nuñez, como argumento central.
Incluso, agregó que el joven se encuentra padeciendo “ataques de llanto” y asegura que “no solo no sabe quién es sino que no pudo despedir a su padre“.
En escrito, Nuñez exhorta que se designe con carácter de “urgente” un perito especialista en estudios de tipicidad de ADN con el propósito de que se establezcan los porcentajes de compatibilidad entre Maradona y Lara.
Según cuenta Radio Mitre, el joven sería el resultado de la relación del 10 con Natalia Garat, quien falleció de cáncer de pulmón cunado Santiago tenía apenas tres años. Sin embargo, según el relato de éste, su madre le habría contado a su pareja Marcelo Lara que el joven en realidad era hijo de Maradona.
“Hasta ahí mi papá no sabía que yo era hijo de Diego. Inclusive habían empezado un juicio de filiación que terminó enseguida porque ella falleció de cáncer” explicó Santiago.
Contó, en ese sentido, que cuando tenía 13 años pasó por un kiosco y vio una revista en la que aparecía junto al astro pero con la cara pixelada. “Quedé en shock, no entendía qué hacía en la revista. Lo llamé a mi papá, le pregunté y me contó todo” dijo.
Su historia retomó impulso hace un año cuando Matías Morla, abogado del Diego, admitió que Lara podría llegar a ser hijo de su cliente y que colaboraría para que se sepa la verdad.