Los dimes y diretes sobre las segundas dosis de la vacuna Sputnik V contra el coronavirus, llevó a que la ministra de Salud, Carla Vizzotti aclare que “agosto será el mes de las segundas dosis”.
En diálogo con C5N, la funcionaria remarcó que “las vacunas que lleguen de AstraZeneca y Sinopharm se van a destinar a completar esquemas”, y destacó: “La Argentina contará con alrededor 3 millones de vacunas producidas en nuestro país; a partir del lunes, estará el primer millón; y la cuarta semana de agosto, con los controles de calidad, seguramente habrá 1.6 o 1.7 millones de dosis más. Esperamos también tener noticias para recibir más dosis de la Federación Rusa”.
Según dijo, “el pasito que nos queda es acelerar las segundas dosis, sobre todo en mayores de 50 años, para que, si tenemos un aumento de la circulación de la variante delta, nos encuentre mejor preparados para evitar las hospitalizaciones y muertes”.
Vizzotti señaló que la ciudad y la provincia de Buenos Aires son las regiones más avanzadas en relación a los estudios sobre la complementariedad de las vacunas, y explicó que este miércoles se reunirá con el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, para conversar acerca de “la intercambiabilidad de vacunas” porque “se están terminando de analizar los datos”.
“El primer análisis preliminar es a los 7 a 14 días de Sputnik con AstraZeneca y de Sputnik con Sinopharm; y agregamos una rama de Sputnik con Moderna para trabajar en eso”, continuó.
Vizzotti explicó que “hay evidencia científica”, a partir de estudios realizados principalmente en el Reino Unido, que “demuestran que Sputnik con Moderna debería funcionar muy bien”, como también debería darse ese efecto positivo en combinación con la AstraZeneca. “Hay datos muy importantes que avalan la teoría de que la intercambiabilidad de vacunas inclusive puede estimular más a nuestro sistema inmunológico y generar más anticuerpos”.
Al momento de referirse a las vacunas de Moderna, indicó que estiman que el objetivo sea aplicarlas a “alrededor de 900 mil adolescentes”, por lo que las restantes “seguramente se utilicen para segundas dosis de la vacuna Sputnik”. Y subrayó: “En este momento, sanitariamente es más importante completar el esquema de vacunación de una persona mayor de 50 años, que iniciar un esquema de vacunación en un adolescente sano, desde el punto de vista de riesgo de hospitalización o muerte”. Para ella, el objetivo es llegar a aplicar la segunda dosis a al menos el 60% de los mayores de 50.