A muy pocos kilómetros del coqueto centro de Luján de Cuyo, se encuentra ubicado el barrio Terrazas del Río II, una humilde barriada que parece haber sido olvidada por la gestión de Sebastián Bragagnolo.
Resulta que en esta zona del departamento, desde hace tiempo, el sistema cloacal dijo basta y las cámaras sépticas de los lugareños no dejan de rebalsarse.
“Hace aproximadamente cinco meses que tenemos problemas con las cloacas, en realidad el barrio tiene problemas, se tapan todas”, dijo Leticia Arriola, una de las vecinas que dialogó en exclusiva con News Online.
La desesperada mujer, que tiene su vivienda en la manzana I, relató su situación particular: “El problema mío es que está la cámara esta acá al lado de mi casa en un baldío, entonces se tapa y literalmente no podemos entrar porque hay mierda por todos lados”.
“Vivimos rodeados de mierda y contaminación”, agregó la mujer, que en todo momento de la charla se mostró sumamente preocupada – y con razón- por los problemas de salubridad que esto genera en la zona.
Si bien relató que ya notificó de la situación a las autoridades, como era de esperarse, las respuestas llegan tarde y no solucionan el insoportable problema.
“Hice el reclamo, llamé a todo el mundo, me volví loca porque el olor es sumamente espantoso”, agregó.
Igualmente, destacó que personal de la comuna se hizo presente en su casa, pero “quisieron destapar la cloaca y no pudieron”, y señaló que “los empleados me explicaron que la herramienta que utilizaban llegaba hasta la mitad de mi casa, y no había manera de destaparla”.
Pese a esa dificultad, los operarios “se fueron a la otra cámara que está en la entrada del barrio y tampoco pudieron”.
“Empezaron a hacer acequias para que todo corriera hacia la acequia de la calle y no hacia mi casa”, continuó diciendo.
Las imágenes a las que accedió este diario, reflejan cómo viven los vecinos de la barriada, rodeados de materia fecal y contaminación, tal cual reza el título de este artículo.
“La municipalidad cuando se tapan las cloacas viene y se toma su tiempo”, indicó y remarcó: “Esto no debería pasar”.
Recordó que “Anoche (por el miércoles) me dijeron de enviarme un camión con cloro, pero con eso hago destrozos en el jardín, me destruye las plantas”.
“Es increíble el problema de contaminación que tengo en toda mi casa, no puedo ni salir con mi hijo afuera. Si salgo al patio, traigo toda la mierda para adentro”, completó la desesperada mujer, una de las tantas vecinas que literalmente se “acostumbró a vivir entre la mierda”.