El penitenciario de 49 años, Rafael Alejandro Tobal, murió anoche, luego de disparar accidentalmente una escopeta que aparentemente estaba limpiando en el penal Almafuerte II. El impacto dio entre sus ojos.
Trascendió que el suboficial, que contaba con 17 años de experiencia, se encontraba manipulando el arma estando cargada cerca de las 22:30.
A los pocos segundos, un fuerte estampido se escuchó en los pasillos del complejo penitenciario. Fue ahí cuando dieron con Tobal, que estaba tendido sobre el suelo de la parte externa de la guardia.
Fue inmediato el traslado del penitenciario al Hospital Central, en donde lamentablemente constataron la muerte de Tobal, producto de un disparo en uno de sus ojos.