Un nuevo estudio de la agencia regional de la OMS llamado “Health Care Workers Study (HEROES)” dió como resultado que el 14,7% y el 22% del personal de salud que se prestó para esta investigación, tienen síntomas compatibles con la presencia de depresión.
En la investigación se tomó en cuenta a 11 países de América Latina, se entrevistaron a 14.502 trabajadores sanitarios y participaron Universidades de Chile y Columbia en Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Bolivia, Guatemala, México, Perú, Puerto Rico, Venezuela y Uruguay.
Rubén Alavarado, investigador de la Universidad de Chile expresó: “La pandemia aumentó el estrés, la ansiedad y la depresión de los trabajadores de la salud y dejó al descubierto que los países no han desarrollado políticas específicas para proteger su salud mental”.
El estudio revela que lo que más influyó en el desgaste de la psiquis del personal de salud, fue la necesidad de apoyo emocional y económico. Además, estaban muy preocupados ante la posibilidad de contagiar a sus familiares. También se presentaron muchos conflictos con las familias de las personas afectadas por coronavirus y hubo cambios repentinos en las funciones laborales.
El informe presentado dice que ante este problema, se recomiendan mejoras en los salarios de los profesionales y contratos, modificaciones en el ambiente laboral y que también se deben generar espacios donde se puedan desahogar.
Por su parte, el director del Departamento de Enfermedades no Transmisibles y Salud Mental de la OPS, Anselm Hennis afirmó: “la pandemia evidenció el desgaste del personal de salud y en los países en los que el sistema de salud colapsó, el personal sufrió jornadas extenuantes y dilemas éticos que impactaron en su salud mental”.
Afortunadamente, los factores que sí protegieron la psiquis del personal de salud fue la confianza en la religión, en las instituciones y en el gobierno con el manejo de la pandemia y también contar con el apoyo de sus compañeros.
49Foto/ BBC