“Como resultado del diálogo llegamos a un acuerdo con los médicos anestesiólogos quienes se reincorporarán a los hospitales normalizando de esta manera las cirugías programadas”, fue el tuit del gobernador Rodolfo Suarez que hizo estallar por los aires a la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) de Mendoza, que en medio del conflicto salarial que mantiene con el Ejecutivo, repudió ese arreglo por fuera del ámbito paritario.
“Es totalmente vergonzoso”, dijo el secretario general de ATE, Roberto Macho, que criticó fuertemente al Gobierno provincial por haber salido “a decir que ha acordado por fuera de las paritarias, por fuera de los ámbitos naturales, y vulnerando toda normativa de legalidad y de las leyes presentes, un acuerdo con un grupo etario que no llegan a ser 70 profesionales de la salud”.
Advirtió que dicho arreglo traerá “mayor precarización laboral” y “mayor trabajo en negro”, sin tener en cuenta el convenio colectivo de trabajo.
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El líder sindical lamentó que se haya “dejado afuera a todos los demás trabajadores que estén en un quirófano”.
Si las aguas estaban convulsionadas, este arreglo acrecentó el malestar, por lo que Macho hizo hincapié en que el “jueves 30” de junio se llevará a cabo una “huelga generalizada con todos los sindicatos de la salud de toda la provincia”, y adelantó que también se sumarán los gremios “de la administración central, y los sectores autárquicos y descentralizados”, con los que también pedirán “un aumento salarial para todos nuestros trabajadores en el marco de los 40 mil pesos para las clases más bajas”.
“Entiéndase que un trabajador en anestesia cobra una planta permanente, más una prestación transformada en lo que vendría a ser productividad por cirugía; por ende tiene que tener un vademécum propio”, y añadió que dichos trabajadores “estaban en el marco de los 30 mil pesos, y llegarán ahora en el marco de los 60 mil pesos por guardia”.
Y profundizó: “El mínimo que cumple de guardia son 240 mil pesos semanales, a eso hay que multiplicarlo por cuatro, más el salario, estamos hablando de salarios que superan ampliamente entre tres y cuatro veces lo que cobra un técnico instrumentista”.
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Muy molesto por esta decisión, remarcó que “el Gobierno no puede acordar con algunos y dejar por afuera a todos los demás trabajadores. Es una simple vergüenza lo que ha estado haciendo el Gobierno de la provincia de Mendoza y la ministra de Salud, es lamentable el desconocimiento de las normas laborales”.
Señaló que “se trabaja en equipo, y no puede explotar a los técnicos, a los circulantes, a los enfermeros y a todos los que están haciendo una cirugía”.
“La huelga de 30 (de junio) cada vez se está acentuando más, y se está haciendo sentir por cada uno de los establecimientos públicos de toda la provincia de Mendoza”, enfatizó.
Y sostuvo que será “la primera huelga decretada por Suarez del frente estatal”, y advirtió que podría no ser la única “si no se arregla la situación de todos los trabajadores”.
