No lo mencionó, pero las críticas eran para Alfredo Cornejo.
El hoy embajador argentino en España, Ricardo Alfonsín, afirmó estar “indignado” por la forma de actuar del radicalismo, tras los dichos de la titular del PRO, Patricia Bullrich, quien sugirió irregularidades en la negociación con el laboratorio Pfizer para la compra de vacunas contra el coronavirus, y espera que “se rectifique” porque el hecho “no existió”.
En ese sentido, en diálogo con Radio 10, explicó que está “indignado” con el radicalismo que “no dijo nada” al respecto porque “a nadie le ponen un revolver para que se calle la boca” y que hay un 30% de radicales que no pueden lograr que quienes están “en condiciones de que las cosas cambien” termine la alianza con el PRO, avivando las internas en Juntos por el Cambio.
Para Alfonsín, el PRO tiene un “comportamiento, posiciones e ideologías” que no tienen “absolutamente nada que ver con la UCR” y agregó interpelando al resto de su partido: “¿A qué le tienen miedo? ¿Qué es lo que hace que no digan que no comparten lo que ha dicho esta persona?” haciendo referencia a los dichos de Bullrich.
“Yo no creo que le tengan miedo a la dirigencia política o a los aliados, es a otra cosa. Yo creo que le tienen miedo a perder determinados respaldos”, completó.
En ese sentido explicó que hay muchísimos radicales que comparten “el disgusto y el malestar” y una sensación de que “se les fue arrebatado el partido” y que por eso la UCR corre el riesgo de desaparecer históricamente desde el punto de vista de los valores y las ideas, por eso “habrá que crear un nuevo partido”.
“Hay muchísimos radicales que comparten esta sensación de estar militando en un partido que de radical no tiene nada, que sienten que le arrebataron el partido”, dijo.
“Hacer acusaciones de esta naturaleza sin aportar ninguna prueba y sabiendo perfectamente que no existen porque tal hecho no ocurrió es algo que no hay que hacer en política. Ahora Bullrich está empezando a decir que no dijo lo que dijo, espero que se rectifique”, sostuvo Alfonsín.
Patricia Bullrich acusó al gobierno de “coimero” por la vacuna Pfizer y el Presidente la demandará