Este último fin de semana, autoridades ucranianas descubrieron la barbarie rusa en la ciudad de Bucha, a tan solamente 30 kilómetros al noreste de la capital.
En esta región, el Gobierno de Volodimir Zelensky se topó con una masacre deliberada y con cientos de civiles asesinados.
Entretanto, el papa Francisco indicó que reza por los que escapan de Ucrania pero evitó mencionar la invasión de Putin. “Miles de personas se han visto obligadas a huir de Ucrania a causa de la guerra. Pero muchos también se han visto obligados a abandonar su tierra natal en Asia, África y América. Mis pensamientos y oraciones están con todos ellos”, publicó en su cuenta de Twitter oficial.
Por su parte, la fiscal general ucraniana, Iryna Venediktova, precisó que se recuperaron los cuerpos de 410 civiles en los alrededores de Kiev.
El alcalde de Bucha, Anatoly Fedoruk, sostuvo que 280 cuerpos fueron llevados a fosas comunes porque era imposible enterrarlos en los cementerios que están al alcance de los disparos. La firma de imágenes satelitales Maxar presentó fotos que indicó son de una fosa común en el predio de una iglesia local.
Al respecto, el primer ministro polaco pidió poner en marcha una comisión de investigación internacional sobre “el genocidio” cometido a su entender por el ejército ruso en ciudades ucranianas, entre ellas Bucha. “Esas masacres sangrientas cometidas por los rusos, soldados rusos, merecen ser llamadas por su nombre. Es un genocidio, y debe ser juzgado”, declaró a la prensa Mateusz Morawiecki.
El presidente francés Emmanuel Macron reveló que está a favor de que la Unión Europea impulse nuevas sanciones a Rusia tras el descubrimiento de cientos de cuerpos de civiles en la región de Kiev. “Hay índices muy claros de crímenes de guerra” y está “casi establecido que es el ejército ruso” que estaba presente en Bucha, agregó Macron en la radio France Inter.
El mandatario español, Pedro Sánchez, se refirió a un posible “genocidio” en Ucrania. “Vamos a hacer todo lo posible por que quienes han perpetrado esos crímenes de guerra no queden impunes, y por tanto puedan comparecer ante los tribunales, en este caso la Corte Penal Internacional, para hacer frente a esos supuestos casos de (crímenes de) lesa humanidad, de crímenes de guerra y, por qué no decirlo también, de genocidio”, dijo en un foro económico en Madrid.
El ministro japonés de Relaciones Exteriores aseguro estar “profundamente conmocionado por la información según la cual actos de violencia excepcionalmente crueles contra civiles han tenido lugar cerca de Kiev”. Yoshimasa Hayashi durante una recorrida a Varsovia agregó: “El asesinato de civiles inocentes es una violación del derecho humanitario y es inaceptable, y condeno con firmeza esas acciones”.