Por primera vez desde año 1918, Rusia entró en default. Según informó Bloomberg, el país atraviesa una suspensión de pagos.
Lo que sucede es que dejó de pagar su deuda soberana. Desde el gobierno de Vladimir Putin debían abonar 26,5 millones de euros para bonos en euros y 71,25 millones de dólares para títulos en dólares.
Sin embargo, Rusia salió a decir que si tiene los fondos para cubrir estos gastos y que se vio obligada a no pagar. Por este motivo, desde el gobierno todavía no emiten ningún comunicado oficial que aclare esta situación.
Dicen que el 20 de mayo transfirieron fondos al National Settlement Depository (NSD) y afirman que Occidente le impide el pago de su deuda ya que han impuesto medidas de bloqueo.
Según la agencia mencionada, la suspensión de pagos tiene de momento un “carácter más bien simbólico y no es gran cosa para los rusos”.