Sandra Pitta, investigadora del CONICET estuvo en diálogo este jueves con Radio News -en el ciclo que conducen Christian Sanz y Claudia Durán– para hablar sobre la la compra, arribo y aprobación de la vacuna rusa Sputnik V.
Pitta explicó qué significa que la haya aprobado el Ministerio de Salud y no la ANMAT, y aseguró que “no es confiable. En este caso lo que ocurrió fue que el Ministerio de Salud decidió saltearse a la ANMAT y dice que hay una recomendación por parte de la ANMAT pero no hay una disposición de la ANMAT, no hubo un estudio serio”.
“No deben haber querido firmar algo que no tenía evidencia científica porque de la vacuna se tiene muy poca información y tiene información secreta, que debería ser publica”, consideró la especialista.
Me parece que es una muy mala noticia”.
Respecto de las autoridades rusas, Sandra Pitta comentó que “no sabemos qué información le dieron a los que fueron en esa comitiva, no sabemos en qué se basan para autorizar el uso de emergencia y me parece que es una muy mala noticia, por lo que implica para la ANMAT, y por lo implica para la salud de la población fundamentalmente”.
Según la científica, “al ver que no podía implementar la vacuna de AstraZeneca supongo que el Gobierno habrá recurrido por algún motivo a las dosis de una vacuna que se desconoce; se desconoce cuáles son los resultados de la Fase 3 o si se puede aplicar a mayores de 60″, y sentenció: “Yo sospecho que hay un negocio detrás de esto”.
Faltan todos los principios de ética científica”
En ese sentido, agregó: “Me parece que hay algún tipo de negociado con respecto a esta vacuna. A mí lo que me asombra es la facilidad de determinado grupo científico que está vinculado al Gobierno. Que salgan a decir esto no puede ser aprobado de esta forma, faltan todos los principios de ética científica”.
Al ser consultada respecto de si hay evidencia alguna de ese negociado, respondió: “Calculo que gente como la doctora Carrió o la diputada Ocaña están buscando esas pruebas y a mí me llama la atención que se haga esta aprobación tan irregular, entonces, lo único que creo es que hay un negocio”.
E insistió: “Las pruebas las deberán buscar los que están investigando. Sí he tenido acceso a determinados informes internos de la ANMAT, pero eso me preocupo todavía más, porque es ínfima la información que hay y los efectos adversos son bastante alarmantes”.
Sobre la decisión de Alberto Fernández de traer la vacuna para cumplir con la promesa de inocular antes de fin de año, Sandra Pitta aseguró que “eso es anteponer la política ante la ética”.
“Hay decisiones políticas que se deben tomar, pero en este caso es una decisión que no es ética. Es lo mismo que yo te diga ‘no tengo nada, me invento algún medicamento y se lo doy a la gente aunque no sirva’. En salud no se hace lo que sea, en salud está la vida de la gente en peligro”, aseveró la científica.
Y agregó: “Que un presidente tome una decisión de este tipo solo porque quiere cumplir con una promesa, no se lo debería permitir nadie del área de salud”.
Por último afirmó que lo que hizo la ANMAT “es una recomendación”, y explicó que “cuando la ANMAT autoriza, hay una disposición y en este caso no hay una disposición, en este caso hay una resolución del Ministerio de salud que dice que se recomienda” por parte de la ANMAT.