Serios incidentes se dieron durante la tarde de este viernes en los alrededores de Tribunales en San Rafael.
Una vez conocida la sentencia a 11 de años de prisión para Marcos Graín, tras el abuso sexual y muerte de Paula Toledo, una gran cantidad de sanrafelinos descargó su furia contra las instalaciones, la policía que custodiaba el edificio, y contra Graín cuando salió esposado.
Corridas, piedrazos y botellazos dominaron la escena en horas de la siesta, que también estuvo marcada por los gritos y lágrimas de quienes consideraron que la condena a Graín “es prácticamente nada por lo que hizo”.
Antes de llegar a la penitenciaria ubicada en avenida Mitre al 2012, el condenado pasó por una dependencia de Investigaciones, a fin de cumplimentar una serie de requisitos judiciales.
