Luego del aumento de la luz, el Gobernador Rodolfo Suarez anunció la puesta en marcha de dos importantes licitaciones para la provincia. La primera se enmarca en la extensión del Plan de Movilidad y Energía para el Gran Mendoza y la segunda está incluida en los proyectos de modernización del sistema de riego que lleva adelante el Gobierno.
Se trata de la construcción del transporte Eléctrico Cruz de Piedra – Gran Mendoza y de las obras que se realizarán sobre la hijuela Esteban. Las tareas traen aparejadas no solo grandes inversiones sino que además contemplan la creación de varios puestos de trabajos para mendocinos.
Estamos poniendo en marcha el proceso licitatorio para construir el transporte Eléctrico Cruz de Piedra – Gran Mendoza, la obra de mayor importancia para el sistema eléctrico de Mendoza, esperada desde hace quince años.
— Rodolfo Suarez (@rodysuarez) January 13, 2022
“Luego de dos intentos (2007 y 2011) estamos poniendo en marcha el proceso licitatorio para construir el transporte Eléctrico Cruz de Piedra- Gran Mendoza, la obra de mayor importancia para el sistema eléctrico de Mendoza, esperada desde hace quince años”, explicó el mandatario. La iniciativa busca resolver “problemas actuales, ya que hace más de 10 años que Mendoza no cubre sus picos de demanda en el verano. También, este proyecto nos permite continuar desarrollando energías renovables y proyectos hidroeléctricos, que generan empleos y crecimiento”, agregó.
En la actualidad, la provincia tiene instalados 1.500 megavatios de potencia en generación. Con la construcción del transporte Eléctrico Cruz de Piedra-Gran Mendoza se espera poder incorporar 1.000 megavatios más al sistema argentino. De esta manera, Suarez aseguró que la obra “nos dará seguridad eléctrica frente a fallas del sistema de generación y fenómenos climáticos”.
En cuanto a la modernización del sistema de riego hijuela Esteban, la inversión asciende a $607,8 millones y el dinero proviene del Banco Interamericano de Desarrollo (BID). Se trata del revestimiento de 10 km del cauce, que se realizará sobre la cuenca del río Mendoza, y la construcción de un reservorio, entre otros importantes componentes con el objetivo principal de mejorar la eficiencia en la distribución del agua. El plazo de ejecución es de 12 meses.
Además del revestimiento del cauce, se ha previsto la ejecución de un reservorio de regulación del sistema, con un volumen útil de 268.000 m3. Esta obra permitirá independizar el caudal que se distribuye en la cola del sistema de las fluctuaciones de la red de riego aguas arriba.
Ver: El Gobierno dio inició a las visitas técnicas a la obra de Cruz de Piedra-Gran Mendoza
La obra energética más importante del Gran Mendoza
La ejecución del proyecto fue anunciada por el Gobernador Rodolfo Suarez y el ministro de Economía y Energía, Enrique Vaquié, a finales de octubre, cuando se pusieron en marcha todos los detalles técnicos y económicos para su concreción.
“Es posible gracias al orden de las cuentas públicas, ya que son proyectos muy caros. Es lo primero que se encara para el transporte desde que se privatizó, hace más de 20 años. Nunca antes se había podido hacer, por una cuestión de presupuesto, y ahora se logra por el orden y la autoridad”, afirmó Vaquié durante la presentación.
El Gobernador detalló que es una obra fundamental para Mendoza y Argentina, ya que se vincula el sistema eléctrico Cuyo (Cruz de Piedra) con el sistema nacional y es un paso más hacia una transición energética que garantice abastecimiento para todos, menos fallas y menos contaminación.
El proyecto fue desarrollado por la Empresa Mendocina de Energía (Emesa), será adjudicado por licitación desde el Ministerio de Economía y Energía y se ejecutará desde el Fondo Fiduciario del Plan de Infraestructura Eléctrica de Alta Tensión de Zonas Aisladas y en Desarrollo (FOPIATZAD).
Desde Emesa aseguraron que “la línea de alta tensión da perspectiva de 20 años a futuro al sistema de transporte eléctrico, imprescindible para enfrentar los desafíos que el cambio climático impone a los sistemas energéticos”.
El objetivo es remplazar combustibles líquidos y gas por electricidad producida de forma limpia, renovable y no contaminante. Además, esta obra cubrirá la demanda creciente durante picos de verano e invierno e incrementará la seguridad, calidad y confiabilidad de un sistema que se encuentra en riesgo de colapso desde hace tiempo.
El financiamiento de la hijuela Esteban
Este proyecto es una actualización de una parte del proyecto formulado en el Departamento General de Irrigación, con colaboración de consultores externos. Fue denominado “Modernización de Redes Derivadas de los Tramos Finales del Canal Cacique Guaymallén-Río Mendoza-Sistema Esteban-Tulumaya”.
El área de influencia geográfica del proyecto se ubica al norte de la provincia de Mendoza, principalmente en los distritos de El Algarrobal, El Borbollón, El Pastal (en el departamento de Las Heras) y Jocolí Viejo (en el departamento de Lavalle).
Corresponden a esta zona de riego un total de 1.724 hectáreas empadronadas. En tanto, los beneficiarios directos del proyecto son 171 usuarios del sistema de riego de la hijuela Esteban, perteneciente a la cuarta zona de riego del río Mendoza.
En vista de que el objetivo medular de esta obra es la eficiencia en la distribución del agua, se ha optado por el revestimiento de los 10 km de la hijuela Esteban y se incluye una gran cantidad de obras singulares, como compartos, puentes vehiculares, peatonales y sifones.
En diciembre de 2021, una comisión del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) visitó Mendoza para tomar conocimiento de la obra que ahora se licita y además para llevar adelante un recorrido por un tramo del canal Cacique Guaymallén que se concretó el año pasado con aportes de este organismo internacional, principal fuente de financiamiento para el desarrollo económico, social e institucional de América Latina.
Con una inversión de $441.859.290,75, en noviembre de 2020, Irrigación inauguró el Revestimiento del Tramo Superior del canal Cacique Guaymallén (7 kilómetros), que incluyó además la modernización de 5 compartos y la construcción de caminos de servicio, beneficiando a más de 15 mil usuarios. Esto fue posible gracias a que Mendoza participó en un Convenio de Préstamo Subsidiario, en virtud de un préstamo que la Nación Argentina recibió del BID para financiar el costo del Programa de Servicios Agrícolas Provinciales (PROSAP).
Irrigación fue la unidad ejecutora de esa obra, es decir, concretó el llamado a licitación y controló los trabajos. El mismo rol tendrá con la nueva obra que ahora se licita.