Este miércoles, la Justicia absolvió a la monja Kumiko Kosaka, una de las tantas religiosas que se vio incolucrada en los abusos sexuales perpetrados en el Instituto Antonio Próvolo de Luján de Cuyo.
Además, las autoridades consideraron que Graciela Pascual, representante legal de la institución, es inocente.
Kosaka, previamente, había sido acusada de “abuso sexual gravemente ultrajante agravado”, en uno de los tantos hechos.
Tras más de dos años de debate, el tribunal encabezado por las juezas Gabriela Urciuolo, María Belén Renna y María Bélen Salido dicto la sentencia ante las víctimas de los aberrantes episodios.
