Luis Lobos, el ex intendente de Guaymallén, ingresó al penal de San Felipe y fue recibido con un gran banquete. Pese a estar condenado por fraude, los privilegios para el funcionario no acaban y los compañeros de pabellón, le hicieron un asado.
Durante la tarde de este sábado, Lobos quedó alojado en el Módulo 6-B del Complejo ubicado detrás de Boulogne Sur Mer.
Los compañeros de pabellón, quienes se encuentran detenidos por delitos de abuso sexual, le dieron una cálida bienvenida con un asado.
Lobos, fue condenado a cumplir 4 años y 6 meses de prisión efectiva como autor del fraude. Un fallo histórico en la provincia, ya que desde 1983, por primera vez un intendente mendocino termina preso por corrupción.