Este sábado, la Unión Comercial e Industrial de Mendoza (UCIM) dio a conocer los resultados de la encuesta de situación económica por rubros en 2020 y las perspectivas para 2021.
“Aunque la actividad económica ha sido un tema complejo y difícil de sostener para muchos empresarios y las decisiones del gobierno no han sido las acertadas para el acompañamiento en cuanto a política económica, los resultados de la encuesta muestran por un lado a sectores totalmente dañados, sin ayuda del sector público, con una caída importante en números y en términos reales, en cantidad de ventas”, sostuvo .
Los datos que se obtuvieron demuestran – sin distinción de rubros – que el 57,5% de los encuestados se encuentra completamente operativo, es decir, que su actividad no ha sido afectada por la pandemia y por las medidas que dispuso el gobierno. El 30% está parcialmente operativo y el 12,5% sin operaciones.
En el sector comercial el 76,47% se encuentra completamente operativo, identificando al rubro de alimentos y venta de materiales de construcción – obras para el sector privado y no obras públicas ya que esta última no ha tenido movimientos- como los rubros con mayor dinamismo durante los meses de pandemia. El área de poli rubros y los que no son de primera necesidad están parcialmente operativos.
En el sector industrial el 77,77% está completamente operativo, entre ellos los rubros maderero, metalmecánico, alimentos. El 22,22% está parcialmente operativo en relación a una manufactura liviana.
En el sector de servicios, el 21,43% está totalmente operativo, el 42,86% parcialmente operativo y el 35,71% sin operaciones. Estos tres últimos datos manifiestan que el sector más golpeado es el de turismo, el servicio de transporte y logística se encuentra operando activamente.
Los datos que se manifiestan son al mes de diciembre del 2020, por lo que se evidencian las variables que han tenido todos los sectores a lo largo del año por cuestiones de pandemia y de medidas gubernamentales. En este caso, lo importante es que de a poco, las actividades se están activando por efecto de que el Gobierno de Mendoza ha permitido circular con más flexibilidad, pero respetando ciertos protocolos. Aunque no pasa lo mismo en todos los rubros, ya que el turismo es el más golpeado y no han recibido ningún apoyo del gobierno para activar el sector ( a pesar de que Mendoza fue unos de los primeros lugares que se abrió para el turismo interno).
Las estimaciones de los encuestados, en términos nominales (valuado en términos monetarios) en su mayoría, prevén que las ventas caerán próximamente en comparación a lo vivido en 2020. Por ello, los resultados revelan que el 30% estima que las ventas crecerán entre 1% y 25%.
-El 22,5% opina que las ventas caerán más del 50%,
-El 15% considera que caerán entre 1% y 25%,
-Otro 15% de los encuestados opina que las ventas caerán entre 26% y 50%,
-Un 5% opina que crecerán más del 50%,
-Otro 5% que las ventas no tendrán variación y
-Un 7,5% considera que crecerán entre 26% y 50%.
En términos reales (cantidad de unidades producidas/ vendidas) han mostrado resultados con algunas variaciones en relación al gráfico anterior.
La pandemia ha cambiado el método tradicional de venta o mejor dicho, ha incrementado en gran medida las ventas online, dadas las restricciones que el Gobierno estableció a lo largo del año para evitar los contagios. En el inicio de la cuarentena, los diferentes rubros realizaban sus ventas en un 60% presenciales y un 40% online y la situación actual revela que las ventas online ocupan el 57,5% de las actividades de los encuestados. Dentro del sector comercial el 47,06% trabajó online este 2020 y el 52,94 no hizo ventas online. En el sector industrial el 22,22% realizó ventas online y el 77,78% ventas presenciales. En el sector servicios, el 42,86% realizaron ventas online y el 57,14% no realizaron ventas online.
En diciembre las ventas online bajaron registrándose con un 42,5% y 57,5% presenciales. En el sector comercial el 76,47% realizó ventas online, y el 23,53% no realizó ventas online. En el sector industrial el 55,56% realizó ventas online y el 44,44% no realizó ventas online. En el sector de servicios el 35,71% realizó ventas online y el 64,29% no realizó ventas online.
Respecto a los salarios, el 67,5% no ha tenido atraso en los pagos, pero si lo han sufrido un 32,5% de los encuestados. En el sector comercial el 41,18% sufrió atrasos y el 58,82% no sufrieron atraso. En el sector industrial el 11,11% sufrió atraso y el 88,89% no sufrió atraso. En el sector de servicios el 35,71% sufrió atraso y el 64,29% no sufrió atraso.
Los impuestos o mejor llamado tributos, que afrontan los diferentes sectores para poder llevar adelante su actividad y que no han dado respiro – ni siquiera en el peor momento de la inactividad económica- han sufrido atrasos en el pago en un 32,5% de los encuestados observando sus variables como muestra el gráfico. El 67,5% no se han retrasado en el pago de impuestos. Esto considerando solamente la actividad formalizada, que se estima es aproximadamente el 50 % de la Economía.
En el pago de los servicios de agua, luz y gas, el 77,5% no ha sufrido atraso, el 17,5% sufrieron atrasos entre el 1% y 25%, y el 5% tienen atraso entre 51% y 75%.
El pago del medio aguinaldo en el mes de diciembre ha sido dificultoso para muchos. El 32,5% declara que podrán abonarlo parcialmente en cuotas, el 10% de los encuestados no podrán pagar aguinaldo, y el 57,5% podrá abonarlo en condiciones habituales. Para el caso del sector comercial el 47.06% podrá abonar el aguinaldo en cuotas como así también en el mismo porcentaje podrá abonarlo en condiciones habituales y el 5,88% manifiesta que no podrá pagar aguinaldo. En el sector industrial en su mayoría no ha mostrado problemas en el pago de aguinaldo y para el sector de servicios el 35,71% podrá pagar en cuotas, el 42,86% lo abonará en forma habitual y el 21,43% no podrá pagar aguinaldo.
Los encuestados manifiestan que de continuar con las restricciones de cuarentena, el 60% podrá seguir operativamente, mientras que el 40% se encontraría con serias dificultades, es decir, un 25% sufrirá pérdidas importantes, el 7,5% cerrarían sus puertas, y el resto deberá reducir su tamaño. El sector industrial indica que podrá continuar operativamente de acuerdo al resultado de la encuesta. En el sector comercial el 64,71% podrá continuar operativa el 23,53% podría sufrir importantes pérdidas y el 11,76% debería reducir su tamaño. Para el caso del sector industrial el 28.57% podrá continuar operativa, el 42,86% podría sufrir pérdidas, el 21,43% tendría que cerrar sus puertas y el 7,14% tendría que reducir su tamaño.
Las empresas tuvieron cambios en su planta de personal por efecto de la pandemia. El 65% no sufrió cambios, el 17,5% aumento la cantidad de personal, y el 17,5% redujeron la cantidad de personal.
Los empresarios estiman que para los próximos tres meses pueden en un 65% no sufrir cambios en su planta de personal, un 20% reduciría la cantidad de personal y un 15% podrían aumentar la cantidad de personal.
Los efectos de la pandemia reflejan la poca confianza que los empresarios tienen para realizar próximas inversiones en su actividad en el 2021. El 70% de los encuestados consideran no realizar inversiones en el corto plazo, un 15% podrán realizar inversiones durante los próximos seis meses, un 7,5% realizará inversiones en el próximo mes y otro 7,5% podrá realizar inversiones durante los próximos seis meses.
El 2020 ha sido un año muy difícil para todos y los rumores viajan a gran velocidad comentándose que en el 2021 puede venir una segunda etapa importante de contagios. A raíz de esto, el 35% de los encuestados considera que todo seguirá igual en su empresa, un 25% estiman que estará peor, aunque otro 25% opinan que están mejor, un 10% mucho peor y un 5% que pueden estar mejor.
La opinión de los mismos respecto de la economía nacional refleja que un 42,5% considera que puede ser mucho peor, 22,5% considera que puede ser peor, un 20% declara que las cosas seguirán igual, un 12,5% considera que la economía nacional mejore y un 3% evalúa que puede estar mucho mejor.
Por último, de acuerdo a los datos relevados, atendiendo a la división entre Comercio, Servicios e Industria, vinculados a la ayuda del Estado, podemos sacar las siguientes conclusiones:
– Actividad Comercial:
El 81 % de los encuestados considera que la ayuda del Estado Nacional fue insuficiente, mientras que el 19 % restante, que el acompañamiento fue el necesario, coincidiendo estas últimas apreciaciones con actividades no tan impactadas por la pandemia como viveristas y venta minorista polirubro y comercio minorista de alimentos y productos de limpieza entre otros, percibiendo el resto de las actividades comerciales encuestadas, que la ayuda no llego de la forma adecuada o fue insuficiente.
Porcentajes similares se dan con la ayuda recibida desde el Estado Provincial, infiriendo que las medidas del Estado Provincial (19% de las respuestas), incidieron directamente en el nivel de actividad de los encuestados (farmacia, materiales para la construcción y hierros para la construcción), mientras que el 81 % restante indican que las medidas adoptadas no fueron suficientes.
Actividad Industrial
Respecto de la actividad Industrial, el 70 % de los encuestados indicaron que las medidas de acompañamiento del Estado Nacional fueron suficientes como para acompañar la pandemia, por lo tanto sirvieron para paliar la disminución de la actividad, coincidiendo que la ayuda del Estado Provincial fue escasa. El 30% a los que no les sirvió o fue insuficiente la ayuda del Estado tanto provincial como nacional, fue para aquellas actividades más castigadas, como lo es la metalmecánica y la construcción.
Actividad de Servicios
El sector Servicios fue el menos alcanzado por las medidas de orden provincial, ya que el 100% de los encuestados indicaron que no fue suficiente lo que desplegó la provincia para apoyar al sector servicios. En cuanto a la ayuda del Estado Nacional, el 70% de los encuestados coincidieron que la ayuda fue escasa e insuficiente. Este 70 %, que a la vez indico que la ayuda del Estado provincial no fue la efectiva, se compone de las actividades más impactadas por los efectos económicos de la pandemia, destacándose el Turismo en todos sus componentes, los agronegocios, Servicios empresariales y Logística.