La NASA lanzó una misión para estrellar deliberadamente una nave espacial contra un asteroide, un ensayo de defensa ante la posibilidad de que la humanidad necesite un día impedir que una roca espacial gigante acabe con la vida en la Tierra.
El DART (Double Asteroid Redirection Test) despegó en la noche del martes a bordo de un cohete SpaceX desde la Base de la Fuerza Espacial Vandenberg en California.
Congratulations to @elonmusk and his Falcon 9 rockets for helping @NASA & @ESA send space probes around the solar system.
Tonight, the DART (Double Asteroid Redirect Test) misssion launches to deflect a potentially hazardous asteroid. pic.twitter.com/SmJkS1QFgi
— Neil deGrasse Tyson (@neiltyson) November 23, 2021
Su objetivo es Dimorphos, una “luna” de unos 160 metros de ancho, que rodea a un asteroide mucho mayor llamado Didymos (780 metros de diámetro). Juntos, forman un sistema que orbita en torno del Sol.
🚀 Estrellando una nave espacial contra un asteroide… a propósito.
Así es como la @NASA y @JHUAPL intentarán cambiar el curso de dicho asteroide, mediante la misión Prueba de redireccionamiento del asteroide doble (#DARTMission): https://t.co/RTrXqnOmLC pic.twitter.com/IoP14CGAbN
— NASA en español (@NASA_es) November 23, 2021
“Asteroide Dimorphos, ¡vamos a por ti!”, tuiteó la NASA después del lanzamiento y más tarde indicó que el DART se había separado con éxito de la segunda parte del cohete.
“Hemos recibido nuestras primeras señales de #DARTMission, que continuará desplegando sus paneles solares en las próximas horas y se preparará para su viaje de ida y vuelta de 10 meses al asteroide”, agregó la agencia espacial.
🚀 Así fue el momento del despegue de una misión de la NASA que tiene el objetivo de impactar un asteroide en el espacio.
👉 https://t.co/GTPz0erYWd pic.twitter.com/6xAsV5NbtV
— CNN en Español (@CNNEE) November 24, 2021
El impacto debería producirse en el otoño boreal de 2022, cuando el par de rocas se encuentren a 11 millones de kilómetros de la Tierra, el punto más cercano al que pueden llegar.
“Lo que estamos tratando de aprender es cómo desviar una amenaza”, dijo el principal científico de la NASA, Thomas Zuburchen, en una teleconferencia con la prensa sobre el proyecto de 330 millones de dólares y el primero de este tipo.