Este martes, el jefe de fiscales de delitos no especializados, Sebastián Capizzi, se tomó unos minutos para hablar con la prensa y referirse al incendio en la playa de San Agustín.
Según explicó el representante del Ministerio Público Fiscal, “todo lo que ocurrió dentro de la playa es responsabolidad del Estado”, teniendo en cuenta que se trata de un predio utilizado por el Gobierno para guardar autos secuestrados.
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Capizzi, directamente desde el Polo Judicial, también opinó sobre a posibles reclamos que puedan efectuar los dueños de los rodados consumidos por las llamas. “Se debe analizar caso por caso“, expresó.
Al referirse a como se desencadenó el incendio, dijo que todo está en plena etapa investigativa, aunque no descartan absolutamente nada.
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“Necesitamos determinar con exactitud cuál fue el origen del incendio, estamos reconstruyendo los sucesos. Las declaraciones de los testigos son importantes, pero hay que esperar a que los investigadores hagan su trabajo”, añadió.
Y continuó: “El combustible que había en los vehículos y equipos de gas, sumado a la condición de viento Zonda que se estaba desarrollando, amplificaron mucho los daños, que si bien aún no se encuentran determinados con certeza, serían entre 26 y 28 mil rodados”, explicó Capizzi.
Por último, el fiscal reconoció que el hecho podría haberse evitado, ya que “los vehículos se están acumulando desde hace muchos años, de forma más o menos riesgosa”.