Un mes atrás, Céline Dion realizó su primera aparición pública luego de más de tres años. La intérprete de “My Heart Will Go On” padece el Síndrome de la persona rígida, una enfermedad neurológica que afecta al sistema nervioso central, principalmente a la espina dorsal y las piernas. Sus principales síntomas son el entumecimiento de los músculos y la rigidez extrema, algo que puede desembocar en algún tipo de discapacidad móvil.
Sin embargo, las noticias que llegan sobre el desarrollo de su enfermedad no son alentadoras. Su hermana Claudette Dion aseguró que la artista desea retomar su carrera artística, pero sus capacidades se lo impiden.
“Músculos como el corazón o la garganta, atrofiados”
Así, explicó que la artista “ha perdido el control de sus músculos”, lo que probablemente le impida hacer determinados movimientos, más aún a la hora de volver a cantar o afrontar una gira con largos desplazamientos y esfuerzos. “Es cierto que tanto en nuestros sueños como en los de ella, el objetivo es volver a los escenarios“, afirmó. “¿En qué estado de salud? No sé”, vacilaba.
El tratamiento que sigue la artista no está teniendo los efectos esperados, algo que ya han revelado en más de una ocasión. “Lo que me rompe el corazón es que ella siempre ha sido disciplinada”, dijo en una entrevista para el 7 Jous de Canadá.
“Ella siempre ha trabajado duro. Nuestra madre siempre le decía: ‘Lo vas a hacer bien’. Lo vas a hacer”, contaba. El síndrome de la persona rígida no tiene cura ni medicación específica, por lo que su diagnóstico y recuperación se complica para la comunidad médica y el paciente.
“Las cuerdas vocales son músculos y el corazón también es un músculo”, reconoció Claudette en esta desgarradora entrevista. “Como es un caso entre un millón, los científicos no han investigado mucho, porque no afecta a tanta gente”, contaba antes de agradecer el inmenso apoyo que la artista y su familia han recibido desde que hicieron pública esta enfermedad.