Las Islas Salomón, una nación-archipiélago situada no muy lejos de Australia, ostenta una población de 685.000 personas de las cuales sólo el 20% cuenta con acceso a Internet.
Desde la semana pasada, es la primera nación democrática en prohibir a su población el acceso a Facebook, la mayor red social del mundo, en nombre de preservar la convivencia ante el ciberacoso.
El primer ministro, Manasseh Sogavare planteó ante el Parlamento que dicha prohibición era necesaria para “preservar la unidad nacional”, “socavada”, a su parecer por Facebook a raíz de la repercusión de los casos de ciberacoso y difamación online.
El ciberacoso está muy extendido en Facebook, la gente ha sido difamada por usuarios que usan nombres falsos, y las reputaciones que la gente se ha construido a lo largo de los años [se destruyen] en cuestión de minutos”.