Durante la mañana de este lunes imputaron al empresario Alejandro “Cacano” Cabanillas, que se encuentra detenido desde el fin de semana, luego de la denuncia de una empleada.
La medida la determinó la fiscal de Violencia de Género Mónica Fernández Poblet, que entendió que existieron los delitos de amenazas coactivas, lesiones leves dolosas y abuso simple, todo esto se agravó por haberse dado en un contexto de violencia de género, indicaron las fuentes a Diario El Sol.
Durante las próximas horas, el empresario de la noche afrontará el circuito judicial, por medio del cual se toman muestras genéticas, de huellas digitales y se chequean los antecedentes.
Sino cuenta con condenas previas, “Cacano” podría quedar en libertad, ya que los delitos por los que fue imputado son considerados excarcelables.
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Esta nueva investigación contra Cabanillas comenzó el pasado miércoles 13 de enero, luego de que una joven saliera de una de las casas que tiene en Luján de Cuyo.
Bajo los efectos del alcohol, pidió ayuda y un celular a una vecina de la zona para comunicarse con el 911, ya que dijo haber estada privada de su libertad durante algunos días.
Cuando logró comunicarse con la policía, la mujer confió que se encontraba en la casa del empresario, y que observó consumo de drogas y alcohol, lo que llevó a que fuera agredida por parte del mismo “Cacano”.
Entre sus dichos, destacó que se encontraba trabajando desde hace cinco meses para el acusado y que pretendía denunciarlo por violencia de género, aunque aseguro no haberlo hecho por miedo a quedarse desempleada.
Un móvil policial llegó hasta el lugar, pero los efectivos n o lograron dar con la joven. Tras establecer contacto con la vecina que le facilitó un teléfono, precisó que la chica se subió a un colectivo porque temía que la buscara el propio Cabanillas.
Desde ese entonces arrancó una búsqueda de la denunciante, a quien lograron ubicar a través de su familia. El último viernes, la joven narró la situación ante las autoridades, que en un principio tuvo a la fiscal Correccional Gabriela García Cobos al frente, ya que entendieron que podría tratarse de un posible caso de privación ilegítima de la libertad.
Luego de la denuncia en la Justicia que efectuó la mujer, a la que se agregó el testimonio de otra persona que estuvo en la casa de Cabanillas el día del hecho, ordenaron la detención del “Cacano”, y que finalmente se terminó dando durante un allanamiento llevado a cabo el sábado.
Por medio de los avances en la investigación, establecieron que la denunciante se desempeñaba como empleada doméstica y también en un local del propio Cabanillas. Aparentemente, la joven vivía desde hace tiempo en esa propiedad. Incluso, algunos días al mes permanecía en el lugar un hijo de ella.
Un dato no menor es que la joven aseguró que el empresario la dejaba encerrada con llave cuando se iba de la casa, aunque otras personas también visitaban la propiedad, por lo que tuvo la posibilidad de pedir auxilio, así como también de escaparse. Debido a esto, por el momento no está constatada la situación de privación ilegítima de la libertad, añadieron.
Por medio de un peritaje médico constataron que la muchacha presentaba lesiones, producto de la agresión que informó a la policía. Así como también comentó que el acusado le realizaba tocamientos, surge del expediente.
Con este panorama, la joven fue asistida por el Equipo Interdisciplinario de Violencia de Género.
