La Cámara de Senadores sancionó hoy por la tarde el Consenso Fiscal impulsado por el presidente Alberto Fernández y los gobernadores. Por medio de este acuerdo, otorgarán 70 mil millones de pesos a las provincias para reactivar sus economías, y también se destaca por la prohibición del aumento de la deuda pública y la suspensión de procesos judiciales por la distribución de la Coparticipación Federal.
La aprobación del acuerdo, que contó con 49 votos positivos y 15 negativos, se dio en una votación en la que el interbloque de Juntos por el Cambio se mostró dividido.
El entendimiento fue firmado por los gobernadores y Alberto Fernández, el 4 de diciembre pasado en un acto que se llevó a cabo en la Casa Rosada.
Como miembro informante del Frente de Todos, el presidente de la comisión de Presupuesto, Carlos Caserio, celebró el acuerdo al manifestar que se trata de una “armonización con las provincias en cumplimiento de normas básicas”.
En su discurso durante la sesión especial del Senado, Caserio criticó a la oposición al sostener que todos los acuerdos de consenso fiscal firmados durante su gestión no correspondían con los datos de la realidad y reprobó el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional y la fuga de capitales.
El legislador cordobés cuestionó lo que él detalló como “el país de Macri, de Disneylandia donde se iba a los actos y se festejaba y se bailaba” en el que “parecía que Argentina estaba en un ámbito de mejoramiento de sus ciudadanos que era imparable”.
“Lamentablemente la realidad demostró que la mayoría de estos consensos no pudieron dar resultados” y que “nunca embocaron con ninguna variable”, comentó el senador oficialista, y remarcó la falta de investigación sobre los capitales que fueron llevados al exterior durante el macrismo.
En representación de Juntos por el Cambio, Martín Lousteau, manifestó que “está claro que con esta presión tributaria no se puede y con este Estado tampoco”.
El senador nacional señaló que Argentina debe aspirar a tener “un Estado riguroso y sobrio con norte y moral en las decisiones”, ya que “actualmente tenemos un Estado rapiñado, desguazado y tironeado por las facciones de poder de turno”.
“Vamos a dar piedra libre con este Consenso Fiscal para volver a subir impuestos como ingresos brutos sin decir cómo y para qué vamos a gastar”, añadió.
El acuerdo fue firmado por todas las provincias, a excepción de San Luis y La Pampa, que expresaron su apoyo pero no rubricaron el documento porque tampoco habían adherido al anterior pacto fiscal.
Tampoco firmó el acuerdo la Ciudad de Buenos Aires, debido a la confrontación que tiene con el Gobierno nacional por la reasignación de fondos coparticipables.
Esta tarde, senadores opositores provenientes de Jujuy, Corrientes y La Rioja, se expresaron a favor del proyecto, en sintonía con el oficialismo.
Otros senadores, como el puntano Claudio Poggi, o Juan Carlos Marino, de La Pampa, se pronunciaron en contra.
El jefe de Gobierno porteño, el macrista Horacio Rodríguez Larreta, criticó la quita de fondos para la Ciudad ante la Corte Suprema y como el Consenso Fiscal tiene entre prerrogativas de base renunciar a los juicios contra la Nación determinó no suscribir el convenio.
El nuevo acuerdo fiscal permitirá a las provincias contar con unos $70.000 millones para reactivar sus economías regionales, luego de un año atravesado por la crisis generada por la pandemia del coronavirus.
Además, determina que en 2021 las provincias no podrán acrecentar el stock de deuda denominada en moneda extranjera respecto a los valores registrados al 31 de diciembre del 2020.