El inicio de la temporada de la Major League Soccer (MLS) está en peligro de sufrir un revés significativo debido a un conflicto gremial entre los árbitros y la Organización de Árbitros Profesionales (PRO), lo que podría resultar en la postergación del tan anticipado debut de Lionel Messi con el Inter Miami.
El partido programado para inaugurar la temporada, que enfrentaría al Inter Miami contra el Real Salt Lake en el DRV PNK Stadium el próximo miércoles, ahora está en duda debido a un posible paro de árbitros.
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Esta medida de fuerza surge como respuesta a la negativa de la PRO de satisfacer las demandas de aumento salarial presentadas por la Asociación de Árbitros de Fútbol Profesional (PSRA), el cuerpo que representa a los árbitros de la liga.
La solicitud de un aumento de salario por parte de la PSRA se fundamenta en el crecimiento explosivo de la MLS, que ha incrementado significativamente las demandas tanto mentales como físicas sobre los árbitros.
Peter Manikowski, presidente y negociador principal del PSRA, destacó: “El crecimiento vertiginoso de la MLS ha aumentado significativamente las exigencias mentales y físicas de los funcionarios (árbitros) y, como tal, ha aumentado las exigencias tanto de nuestro tiempo profesional como personal“.
Cabe recordar, que el acuerdo anterior entre la PSRA y la PRO, ratificado en febrero de 2019, llegó a su fin el pasado 15 de enero, lo que ha llevado a la actual disputa laboral.