La inspección subacuática que se efectuó con un vehículo operado remotamente de última generación en la Presa Potrerillos arrojó resultados satisfactorios, según informaron desde el Gobierno. El objetivo principal de la maniobra era evaluar el estado de sedimentación del descargador de fondo de la presa ubicada en Luján de Cuyo y de las demás estructuras sumergidas.
“La tecnología de punta que utilizamos para hacer los estudios de base nos permitieron saber que debíamos abrir el descargador de fondo para liberar sedimento. El robot acuático bajó más de 100 metros luego de la maniobra y confirmó que lo hecho había dado buenos resultados. La presa de Potrerillos está en muy buenas condiciones en todo sentido. El mantenimiento continua y seguramente haremos una nueva apertura en invierno”, explicó el ministro Mario Isgro.
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La maniobra fue planificada en el marco del estudio del comportamiento de este órgano de seguridad de la presa. Se decidió, entonces, avanzar con métodos más sofisticados y se le solicitó al concesionario Cemppsa (Consorcio de Empresas Mendocinas para Potrerillos SA) la utilización de nuevas tecnologías.
En primera instancia el operativo tenía por objetivo evaluar el estado de sedimento y luego proceder a una apertura a caudales mayores de los normales, para analizar su viabilidad. Como resultado, la apertura de las compuertas permitió liberar sedimento acumulado para garantizar el correcto funcionamiento.
“Todo esto estaba programado para agosto de 2021 pero entre pandemia y algunas complicaciones para traer el robot de Chile, tuvimos que hacerla ahora. La apertura se hizo con gran caudal para remover los sedimentos acumulados, los que fueron evacuados en dilución en un gran porcentaje de agua y por esto no hubo gran afectación aguas abajo”, resaltó Juan Pablo Cordone, responsable de Auscultación y Obras Civiles en Cemppsa.
En el mismo sentido, el ingeniero Oscar Navarro, consultor independiente por parte de la Provincia, destacó el éxito con el que se completó la maniobra con la remoción de los sedimentos acumulados en el fondo del dique.
“Podemos afirmar que la presa Potrerillos tiene el descargador de fondo operable frente a cualquier requerimiento a futuro”, confirmó el especialista en Obras Hidráulicas y Presas.
En tanto, la directora de Hidráulica, Yamila Arnosti, agradeció a los profesionales que estuvieron trabajando durante el operativo como Alejandro Almenara, de la Asociación Mendocina de Windsurf; Hugo Di Rocco, Rolando Rico, Ramón González, Fabián Muñoz y Pascual Suarez, de Náutica de la Dirección de Recursos Naturales Renovables; Juan Manuel Casal y Mariano Di Meglio, de Mariscope Argentina; Gerardo Guarnieri, de la Dirección de Hidráulica, Inspección Fase II, y Gabriel Pérez, Cristian Villamarín, Andrés Domínguez y Juan Pablo Cordone, de CEMPPSA. Además se trabajó coordinadamente con los municipios de Luján y Maipú, Defensa Civil, Policía de Mendoza y Aysam.
La ingeniera Arnosti manifestó: “La evaluación permanente de estas obras es fundamental para garantizar la seguridad de la presa y del embalse. Este operativo demuestra un gran avance en el conocimiento de esta obra y la sinergia en el trabajo en conjunto con la empresa, el Estado Provincial, representado por el Ministerio de Planificación e Infraestructura; la Dirección de Hidráulica y la ORSEP (organismo nacional) que fiscaliza Potrerillos”
La importancia del descargador de fondo
Es un componente principal que tiene la presa Potrerillos y está diseñado para permitir el vaciado rápido del embalse desde su nivel máximo hasta la mitad de la altura en un tiempo no mayor a los 10 días.
Además, puede desalojar sedimentos en suspensión cuando se detecten
avenidas de agua barrosa, a fin de evitar su asentamiento y consolidación en el sector aguas arriba de la embocadura y así, prevenir su obstrucción.
También permite abastecer las demandas de agua urbana y riego, en caso de salir de servicio el sistema de aducción.
En esta inspección subacuática con el ROV se extrajeron muestras de sedimento que permitieron medir la altura existente entre la superficie de los sedimentos y el dintel del ingreso en todo el ancho de la embocadura.
También se inspeccionó la torre de aireación para verificar si los conductos de aireación se encontraban sin obstrucciones.
El mismo procedimiento se hizo en la toma de medio fondo para ver si las vigas prefabricadas que tapan la toma estaban en buen estado y sin derrumbes u obstrucciones.
Otro de los sectores que se analizó fue la toma del túnel de aducción para verificar el estado de las rejas y su pintura de protección.
Es importante destacar que también se realizaron inspecciones con esta misma tecnología en la presa del embalse El Carrizal, donde se evaluó el estado de la Obra de Toma de aducción a Central, las rejas y estructura. Los resultados fueron óptimos.
Fuente: Prensa Gobierno Mendoza