Ramón Santamarina (68), un contador jubilado radicado en Luján de Cuyo, fue descubierto con un disco rígido con 1.701 archivos de pedofilia. Fue condenado a un año de prisión en suspenso, pero está en libertad.
Para el desarrollo de la investigación, fue de gran ayuda el aporte que hizo el Centro Nacional Para Niños Desaparecidos y Explotados (NCMEC), una institución creada en 1984 en Washington y que se dedica a rastrear archivos de abuso sexual de menores que se encuentran en internet.
Esta entidad llegó a un acuerdo con Argentina y pone en conocimiento de las autoridades cuando toma conocimiento de la difusión de estos archivos de pedofilia en computadoras que se encuentran en nuestro país.
Corría el año 2018 y detectaron una dirección IP de Mendoza que contenía una gran cantidad de elementos de este tipo.
El fiscal Santiago Garay fue notificado de esto y avanzó con la investigación. Luego de algunos meses, el 27 de noviembre allanaron una propiedad de calle Quito al 7619, en Chacras de Coria, Luján de Cuyo.
Según publicó Diario Uno, en este domicilio dieron con Santamarina. Durante el procedimiento secuestraron un disco rígido con capacidad de 1 terabyte. Este dispositivo fue enviado a Buenos Aires donde fue analizado por especialistas en informática.
Los entendidos se toparon con 1.701 archivos de pedofilia.
La causa siguió su curso y hace días, el contador jubilado admitió haber almacenado el material de abuso sexual infantil, por lo que fue condenado a 1 año de prisión en suspenso por el magistrado Diego Flamant, que tuvo en cuenta el acuerdo entre el fiscal y el abogado defensor del ex contador.
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