Pareciera ser que la semana que inicia no será para nada tranquila, ya que Juntos por el Cambio se plantó y no daría quórum el martes en Diputados, cuando debería ser debatida la famosa ley de etiquetado frontal.
El oficialismo está muy interesado en que prospere esta iniciativa, que dentro de pocos días perderá estado parlamentario.
Esta movida por parte de la oposición, se trataría de una especie de estrategia frente a un gobierno debilitado tras la floja elección que realizó el pasado 12 de septiembre.
La ley de etiquetado frontal obtuvo apoyos y rechazos en todo el arco político, aunque en el oficialismo esperaban cosechar votos de legisladores de la Coalición Cívica y la Unión Cívica Radical. De no haber quórum, la tarea parece más que compleja para el oficialismo.
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“Como es de su conocimiento, dicha dependencia funciona los días hábiles de 10 a 17 hs. y fuera de ese horario, no es posible para ningún legislador dar ingreso a los proyectos, solicitudes o comunicaciones que por allí tramitan”, indicaron desde el arco opositor mayoritario.
Además, se quejaron de que “el oficialismo citó a una reunión sin consensuar nada, de sorpresa. Si nos citaron sin consultarnos, debe ser porque tienen el quórum y no nos necesitan”, lanzó con cierta ironía a LPO un legislador opositor.
Inclusive, dijeron que debido a la convocatoria inesperada, hay varios representantes del bloque con “problemas de pasajes”.
Sobre la ley de etiquetado frontal, en Juntos por el Cambio explicaron que no hay una posición unificada del bloque, aunque está latente la posibilidad de “no acompañarla”.
El proyecto obtuvo dictamen el 15 de julio, después de más de un semestre de debate, y busca obligar a que los alimentos y bebidas analcohólicas informen sus nutrientes críticos con una etiqueta octogonal, de color negro y letras blancas, que ocupe al menos el 5% del tamaño del envase.
Indicaron que los nutrientes críticos son los “excesos” en azúcares, sodio, grasas saturadas, grasas totales y calorías, causales de la mayoría de las enfermedades evitables. Los edulcorantes y la cafeína deberían informarse y aclarar que no es recomendable para niños, niñas y adolescentes.
“Carmen Polledo planteó algunas modificaciones y ni siquiera fueron tenidas en cuenta, yo personalmente la voy a rechazar”, comentó un miembro de la bancada. Son varios los miembros liderados por Mario Negri que presentaron otras iniciativas. Sin embargo, el oficialismo avanzaría con su proyecto.
Frente a este panorama, el oficialismo deberá buscar los votos necesarios para el quórum entre sus aliados provinciales. El mayor inconveniente que deberá sortear Sergio Massa, es que en los distritos del norte del país como Tucumán o Salta creen que la ley podría perjudicar a sus empresas, especialmente a las industrias relacionadas con productos azucarados.
