Marcos Herrero, un destacado adiestrador de canes especializado en búsqueda de personas, encontró este último miércoles, algunos restos óseos en una propiedad ubicada en la localidad de Potrerillos, Luján de Cuyo.
Con el correr de las horas, y con la investigación avanzada, confirmaron que se trataba de parte de un cráneo humano.
Algunas estimaciones, dieron cuenta de que podría tratarse de Viviana Luna, una mendocina que desapareció en 2017.
“En el día de la fecha, en horario del medio día, ingresó una denuncia en la que se manifestaba que, en una propiedad ubicada en la localidad de Potrerillos, Luján de Cuyo, una persona encontró restos óseos. Se desplazaron uniformados de la policía, la antropóloga forense y personal de policía científica para analizar los restos y hacer una inspección en el lugar”, informaron fuentes judiciales.
“También, se hicieron presenten personal de bomberos ya que los restos estaban entre unos restos de carbón para que hagan la pericia correspondiente”, comunicaron.
Luego de una minuciosa tarea, “se pudo determinar que los restos encontrados pertenecen a una persona, es parte de un cráneo. Para obtener más información se le realizarán las tareas correspondientes en el Laboratorio de Antropología Forense y posteriormente se va a remitir al laboratorio de genética para tratar de determinar la identidad”.
Los voceros, señalaron que “dentro de la habitación donde se encontró el cráneo había un monedero con notas, escritas en computadora, que son bastante ilegibles por el estado en el que se encontraban. La Policía científica secuestró todo el material a los efectos de analizarlo el material”.
El fiscal de Homicidios, Gustavo Pirrello, se encuentra por estas horas al frente de la causa.
Herrero fue contactado y contratado de forma privada por la familia de Viviana Luna, por lo que no figura dentro del expediente de la causa.