En sintonía con muchos de los anuncios pronunciados desde el Gobierno nacional, ambas cámaras del Congreso de la Nación empezaron a intensificar las negociaciones para el regreso a la presencialidad plena.
Ante un planteo del senador radical Pablo Blanco durante la reunión de comisiones de Minería y de Presupuesto de la Cámara alta, el jefe de la bancada oficialista, José Mayans, reveló que se está trabajando en un acuerdo para organizar una sesión presencial en el corto plazo, aunque sin confirmar una fecha concreta.
“Vamos a llegar un acuerdo respecto de una sesión presencial que vamos a tener y del trabajo de las comisiones, que estamos viendo el funcionamiento mixto hasta que podamos ajustar todos los detalles”, respondió ante la consulta del fueguino.
Según NA, en Diputados se está avanzando en la misma dirección: según fuentes parlamentarias del oficialismo, el presidente de la Cámara baja, Sergio Massa, se reunió con el jefe y la vicejefa del bloque del Frente de Todos, Máximo Kirchner y Cecilia Moreau; con el titular del interbloque Juntos por el Cambio, Mario Negri, y con el presidente de la bancada de la Coalición Cívica, Juan Manuel López, a quienes les comentó que este jueves saldrá una resolución oficial firmada certificando la vuelta a la presencialidad de sesiones.
El interrogante persiste en el caso de las reuniones de comisión, donde podría haber continuidad del formato de virtualidad. A su vez, Massa notificó a las autoridades de los bloques mayoritarios la hoja de ruta en torno al tratamiento del proyecto de Presupuesto. Esta semana, el ministro de Economía y Finanzas, Martín Guzmán, se reunirá con Massa, con la mesa del bloque del Frente de Todos y sus referentes económicos.
Luego el funcionario repetirá el mismo procedimiento la semana que viene con las autoridades de los distintos bloques opositores y sus espadas económicas.
La siguiente semana, ya en octubre, se iniciarán las rondas de exposiciones de funcionarios para defender el proyecto de “ley de leyes”: entre otros desfilarán por Diputados el ministro de Trabajo, Claudio Moroni, su par de Desarrollo Social, Juan Zabaleta, y el secretario de Hacienda, Raúl Rigo.
El último expositor será Guzmán, quien será mirado de reojo no solamente por la oposición, que intentará arrinconarlo con preguntas sobre la delicada situación económica, sino también por los sectores que responden a Cristina Kirchner, que esperan del ministro un relajamiento fiscal a fin de atender las urgencias sociales con mayor profundidad.
Pese a haber sido ratificado en el cargo por el presidente Alberto Fernández, el titular del Palacio de Hacienda sigue siendo uno de los funcionarios que el kirchnerismo mira con desconfianza por el deterioro de los indicadores económicos y la sujeción del plan económico a la viabilidad del acuerdo con el Fondo Monetario.
En medio de la crisis interna que estalló en el Frente de Todos luego de la paliza electoral que le propinó Juntos por el Cambio, Cristina Kirchner se comunicó personalmente con Guzmán para aclararle que no iba por su cabeza en el Gabinete.