En las últimas horas, anunciaron que el lunes 24 de junio se reabrirán las paritarias con los representantes de los gremios estatales. Los primeros en sentarse en la mesa de negociación serán las autoridades del Sindicato Unido de Trabajadores de la Educación (SUTE), la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) y la Asociación Mendocina de los Profesionales de la Salud (Ampros).
Faltando casi un mes, el Ejecutivo formalizó la convocatoria para volver a negociar los salarios de los empleados públicos.
Después del SUTE, ATE y Ampros, continuarán en las jornadas siguientes las reuniones con los demás gremios que representan a los empleados de la administración pública.
En la última negociación, el Gobierno ofreció dos propuestas y 16 sectores de la administración pública acordaron.
- Una oferta contempló el aumento de 10% en abril, 10% en mayo y 10% en junio (teniendo como referencia el básico de enero de 2024), más tres bonos de $70.000, $50.000 y $30.000 para los agentes que en marzo no hayan alcanzado un salario bruto de dos veces y media el Salario Mínimo, Vital y Móvil. Para los agentes que superaron ese umbral salarial, las sumas no remunerativas y no bonificables fueron de $35.000, $25.000 y $11.000.
- La alternativa 2 incluyó un incremento del 11% en abril, 11% en mayo y 11% en junio, teniendo como referencia el básico de enero de 2024.
Empleados y funcionarios judiciales no aceptaron la propuesta recibieron por decreto un incremento salarial del 10% sobre la asignación de clase para los meses de abril, mayo y junio de 2024, respectivamente, calculados sobre la base fija del mes de diciembre de 2023. El incremento es no acumulativo y alcanza exclusivamente a los agentes del sector del Régimen Salarial 10.
Ese aumento por decreto fue rechazado por los trabajadores judiciales, que decidieron fortalecer sus medidas de fuerza.