Durante una conferencia de prensa, la directora de Comunicaciones del Fondo Monetario Internacional (FMI), Julie Kozack, anunció que se espera un retorno al crecimiento económico en Argentina durante el segundo semestre del año.
Esto surge tras la exitosa evaluación técnica del programa con Argentina, que se encuentra en su octava revisión y se prevé su aprobación por el Directorio Ejecutivo en las próximas semanas, con un desembolso de 800 millones de dólares.
Kozack destacó los avances alcanzados por Argentina en la implementación del programa de estabilización, resaltando el superávit fiscal registrado por primera vez en 16 años, así como la acumulación acelerada de reservas y la rápida reducción de la inflación, que disminuyó del 25% en diciembre al 8,8% en abril. Señaló que este es un indicio claro de que el país está avanzando en la dirección correcta.
El FMI proyecta que la economía argentina experimentará una contracción del 2,8% este año, pero se espera un repunte del 5% en 2025, según el informe de perspectivas globales presentado el mes pasado en la Asamblea del FMI y el Banco Mundial.
Desafíos para Argentina
A pesar de los elogios, Kozack subrayó los desafíos que aún enfrenta Argentina. Hizo hincapié en la necesidad de seguir construyendo políticas en áreas como la fiscal, la monetaria y las reformas estructurales.
En cuanto a la política fiscal, la portavoz del FMI enfatizó la importancia de mejorar la calidad de la consolidación fiscal para garantizar su durabilidad y equidad. Asimismo, destacó la necesidad de una política monetaria que ancle la inflación y las expectativas inflacionarias, así como una política cambiaria flexible para salvaguardar las reservas.
Sobre las reformas estructurales, Kozack señaló la importancia de eliminar barreras a la entrada de empresas y atraer inversión privada, así como ampliar el apoyo político hacia la estabilización y las reformas necesarias para respaldar la recuperación económica.
Finalmente, Kozack descartó la posibilidad de una nueva inyección de dinero fresco para Argentina, confirmando que el desembolso estará en línea con lo establecido en el programa existente, es decir, 800 millones de dólares.