La Federación Económica de Mendoza lanzó un informe especial de abril de 2023. En este número el trabajo se ocupó de la evolución del consumo y su relación con el bienestar general de la población.
En las entrañas de la teoría económica prevaleciente se encuentra la relación entre el consumo de bienes y servicios y el bienestar.
Esta idea fue propuesta por los economistas “marginalistas” hacia finales del siglo XIX. Desde el punto de vista microeconómico, el bienestar depende de maximizar el consumo de una canasta de bienes, según lo permita el ingreso disponible y los precios de los bienes. Desde un punto de vista macroeconómico, fundado en fundamentos microeconómicos, el bienestar depende de la maximización del bienestar que provoca el consumo per cápita agregado de “un consumidor representativo”. Esta optimización tiene como límites la capacidad de producir bienes de la economía y los usos de este producto agregado.
Existe una gran cantidad de literatura científica y de trabajos informales que relaciona el consumo con el bienestar. Entre estas relaciones se puede ver que la “confianza de los consumidores” en sus expectativas de adquirir bienes de largo plazo se vincula con el consumo agregado presente. Asimismo, el desarrollo humano, que además de los aspectos productivos considera los vinculados a la acumulación del capital humano, como la salud y la educación, puede vincularse al desempeño del consumo agregado.
VER: Las pésimas “perspectivas” económicas de Mendoza y el país, según la FEM
Finalmente, una literatura de raigambre política, relaciona los resultados electorales, especialmente en lo que se relaciona al destino del partido gobernante, y el desempeño del consumo agregado.
Dado que no existe una estimación oficial en la provincia de Mendoza del consumo agregado, en esta ocasión el Observatorio Económico de la FEM presenta una estimación propia de esta variable, basada en el desempeño de las ventas locales de los supermercados, de aspectos cualitativos relacionados con la pandemia y la evolución de los niveles de actividad.
Este estudio permite vincular el desempeño del consumo agregado nacional en comparación con el de Mendoza. Asimismo, en un análisis más desagregado, se puede ver cómo el consumo visto desde la perspectiva microeconómica, está mostrando una concentración en los bienes de consumo vinculados con la alimentación en desmedro del resto de los bienes.
VER: La preocupación de la FEM por las restricciones a las importaciones
La evolución reciente del consumo agregado (estimado) de Mendoza, junto con el desempeño del consumo microeconómico hacen pensar las siguientes reflexiones:
- Mendoza experimenta un menor crecimiento del consumo de bienes y servicios.
- Esto se traduce en un menor crecimiento del bienestar general de la población.
- A nivel macroeconómico, esto se verificaría por la tendencia del consumo agregado provincial que, según el último registro del año 2022, se encontraría en su fase contractiva.
- A nivel microeconómico, por la concentración en la compra de alimentos, y por la caída de los ingresos reales (por efecto ingreso y por efecto precio).
A futuro las perspectivas son:
Durante 2023 las perspectivas de venta de supermercado, ingresos total y salarios atentan contra una recuperación del consumo agregado y microeconómico.
Esto podría traducirse en un mayor descontento social que puede impactar en los resultados eleccionarios, la confianza en la compra de bienes de consumo de largo plazo, en el desarrollo humano (salud y educación) y desembocar en una recesión.
