La última sesión de la Cámara de Senadores donde se aprobó el acuerdo con el FMI, dejó varias perlitas. Muchos congresistas utilizan la oportunidad para realizar largos discursos y utilizar comparaciones, frases o términos populares para respaldar o criticar el tema de debate.
Y en épocas donde la inmediatez de las redes sociales juega su papel preponderante, un error discursivo puede llegar a convertirse en viral; como le sucedió anoche a una legisladora del Frente de Todos cuando cometió varios furcios al momento de citar conceptos.
“Lo primero que tenemos que considerar a la hora de evaluar los términos de este acuerdo es que cuando asumió el Gobierno de Alberto Fernández, el Fondo Monetario Internacional ya estaba entre nosotros con su espada de Domácle (sic), lo que por definición representa el peligro inminente y cercano, es decir… una grave amenaza que se debe afrentar (sic) inexorablemente”, manifestó la senadora del Frente de Todos.
De inmediato, “Domacle” se convirtió en tendencia en las redes sociales y el video del fragmento del discurso de Mendoza se viralizó en Twitter, con críticas y cuestionamientos por su error cometido.
Según la información aportada por su despacho, Mendoza es abogada recibida en la Universidad San Pablo T, de Tucumán y martillera pública, con título otorgado por la Universidad Nacional de Formosa. Fue legisladora por la provincia de Tucumán durante los períodos 2015 – 2019 y 2019 – 2023, renunciando a este cargo en noviembre del año pasado para asumir como Senadora de la Nación.
La legisladora intentó utilizar el concepto de la Espada de Damocles como lo ha hecho en algunas oportunidades Alberto Fernández y dirigentes del oficialismo para explicar la relación con el FMI.
Explicación de la frase
La popular frase remite a la leyenda del historiador griego Timeo de Tauromenio y, como indicó la senadora que cometió el furcio, remite a un peligro inminente. La historia narrada entre los siglos IV y III a.C trata la conquista de Sicilia en el año 316 por Agatocles. Timeo se vio obligado a exiliarse en Atenas, donde comenzó el proceso de escritura que luego concluyeron Diodoro, Cicerón y Horacio en el siglo I a.C.
El cortesano Damocles fue un constante adulador de Dionisio I, pese a que envidaba el poder que le otorgaba estar al frente de la corona. Frente a esta situación, el dictador ofreció intercambiar los roles por un día para que pudiera gozar de las vivencias de un rey.
Damocles disfrutó los placeres de su título temporal, hasta que durante el banquete miró hacia arriba y vio que colgaba sobre su cabeza una filosa espada atada por un único pelo de crin de caballo. Si se rompía, la espada terminaría cortando su cabeza.
Al darse cuenta del peligro, no solo dejó de disfrutar de las bebidas, las comidas y de ser tratado como un rey, sino que pidió terminar el intercambio.
Ese peligro que grafica la historia de la Espada de Damocles es el que conceptualizó Alberto Fernández para explicar la relación de Argentina con el FMI antes del acuerdo, y que intentó repetir Sandra Mendoza cuando se equivocó este jueves en la sesión del Senado.