Se conoció que están comercializándose barbijos truchos del Conicet, son mascarillas de Atom Protec, las cuales se venden a través de las redes sociales y de manera online.
Los especialistas en la materia, revelaron que los originales vienen en color negro y en tonalidades lilas, y dentro de envoltorios individuales, donde se encuentran escritas las características y las instrucciones para su uso.
La textil de La Matanza, Kovi, que fabrica estos productos, observó su venta por tiendas virtuales y en diferentes redes sociales.
Comentaron que a simple vista parecen barbijos reales, ya que han copiado la tipografía y el estampado de la Mascarilla Social N°95. Debido a esta situación, desde la empresa autorizada especificaron las características originales y permitidas. Además, aconsejaron adquirirlos en tiendas oficiales.
La particularidad de los “barbijos del Conicet” son los primeros con tecnología autosanitizante, ya que poseen una capa invisible de nanotecnología que mata virus, hongos y bacterias por el simple contacto, se alcanza a leer en el sitio Unidiversidad.
Atom Protect reveló que la primera tanda de producción fue de color celeste con estampa azul, pero hoy en día no se fabrican mascarillas de ese color. “Actualmente el color es en tonalidades lila”, aseguraron desde la marca, dependiendo el tono de las distintas tandas de producción.
Al diseño actual lila con estampa en gris oscuro y elásticos redondos o planos, se agrega la edición limitada de color negro. Los adulterados, en cambio, pueden variar en color, tamaño y textura de los materiales.
Además, voceros de la firma recordaron que las mascarillas vienen con un envoltorio individual, de plástico transparente, donde están escritas las instrucciones de uso y otras características.
Las mascarillas originales cuentan con propiedades antibacteriales, antivirales y antihongos. En la página web de Atom Protect se especifica que los productos están certificados por el INTI y el INTA, pero no cuentan con la autorización de Anmat. Con estas características, se distinguió a estos tapabocas como de “uso social” y se elaboró también una versión de menor tamaño, para niños. Protegen a las personas durante las actividades diarias pero no son aconsejables para uso médico.
El tiempo de uso no tiene límite, aunque recomiendan no usarlo más de ocho horas por una “cuestión de higiene”. El “barbijo del Conicet” está diseñado con telas tratadas que ofrecen una barrera química contra el Coronavirus. Esa barrera frena los aerosoles que quedan flotando en el ambiente desde varios minutos hasta incluso algunas horas. Los tapabocas falsificados no lo tienen.
Alan Gontmaher, uno de los dueños de Kovi, recomendó comprar las mascarillas de Atom Protect en la tienda virtual de la marca o farmacias autorizadas.