El entrenador Julio César Falcioni recibió una caricia al alma con el pase de Independiente a la semifinal de la Copa Liga Profesional.
Todo el cuerpo técnico saltó de alegría y fue directamente a abrazar al técnico quien esta noche se vio desbordado por las lágrimas, tras la victoria por penales sobre Estudiantes. La primera reacción del DT fue mirar al cielo y señalarlo, en un claro mensaje hacia su fallecida esposa.
El Emperador, un hombre acostumbrado a pelearla y de muchas batallas, metió a su equipo entre los cuatro mejores de la Copa Liga Profesional. Su próximo rival saldrá del ganador del cruce entre Colón y Talleres en Santa Fe.