La mujer se encerró junto a sus hijos la madrugada de este jueves y amenazó con matarlos en su casa situada en el departamento de Maipú. La peligrosa situación se dio mediante un intercambio de mensajes que mantuvo con su ex pareja, el cual derivó en un cuadro de crisis nerviosa. Luego de dos horas de negociación, ella decidió entregarse.
La información policial sostiene que alrededor de la medianoche se tomó conocimiento a través de la línea de emergencias 911 sobre una mujer, de 30 años, que tuvo una pelea con su ex cónyuge a través de WhatsApp y le había manifestado que si no se hacía presente en su casa se iba a suicidar y matar a sus dos hijos, de uno y dos años, informó diario El Sol. Los amenazantes mensajes se los había enviado al padre de los niños y también a familiares y amigos que tienen en común.
Efectivos de la Comisaría 49ª se dirigieron hasta el domicilio del barrio cerrado Villa Domínico, en el distrito de Coquimbito, pero la mujer les dijo a los gritos y mediante fuertes insultos que se fueran.
Frente al ataque de ira que sufría la mujer y debido a que no se logró establecer cuál era el estado de salud de sus hijos, se activó el protocolo de actuación para situaciones de crisis, por lo que se desplazó personal del Grupo de Resolución de Incidentes y Secuestros (GRIS) y del Grupo Especial de Seguridad (GES).
Cuando la ama de casa notó el gran operativo que se estaba formando, apagó las luces y armó una especie de barricada con muebles para bloquear la puerta de ingreso de la casa. El negociador del GRIS entabló diálogo con la sospechosa, quien se mostró en todo momento reticente a acatar los pedidos del especialista.
Durante este proceso, se conocieron los mensajes que le envió a su ex: “Por culpa tuya voy a abrir el gas y vamos a morir los tres” y “vení porque rompo todo y lastimo a los niños. En serio los voy a lastimar”. Además, mientras las fuerzas policiales trabajaban, continuaba escribiéndole al padre de sus hijos: “Ya me voy a enterar quien llamó a la policía, voy a ir y lo voy a matar”. Y le aseguró: “Si llegan a aparecer acá las del ETI las voy a bañar con agua hirviendo. Son quitaniños y no se los voy a permitir. Se ponen del lado de los hombres y en contra de las mujeres”.
Trascendió que la mujer padeció en el último tiempo un cuadro de depresión, motivo por lo que la tarea del negociador fue clave para que la situación no tuviese un desenlace trágico, según notificó diario El Sol.
Con el paso de los minutos el negociador pudo establecer contacto visual con los dos menores y constató que estaban en buen estado de salud. Finalmente, cerca de las 2.30, la mujer accedió a salir de la vivienda. Sin embargo, una vez afuera se tornó violenta y buscó acercarse a su ex pareja para atacarla, quien había llegado momentos antes, pero fue rápidamente reducida por un efectivo.
La sospechosa fue trasladada al Hospital Metraux, en primera instancia, y luego quedó alojada en el nosocomio El Sauce, especializado en salud mental. En tanto, los dos niños quedaron bajo custodia de su padre.
En la causa intervino la fiscal de Homicidios Claudia Ríos, al frente del Grupo Fiscal Especial que tiene injerencia en situaciones de crisis de alto riesgo.