Según un informe médico prepublicado en Journal of the Academy of Consultation-Liaison Psychiatry, un estadounidense de 30 años estuvo a punto de morir tras inyectarse en vena un té de hongos alucinógenos.
Según se supo, el hombre desarrolló una infección potencialmente letal que hizo que los hongos crecieran en su sangre.
Según el portal Gizmodo, este hombre pasó casi un mes en un hospital luego de que su familia lo acercara estando desorientado.
El personaje está diagnosticado con bipolaridad y tiene un largo historial de adicción a los opioides. Sin embargo, decidió dejar de lado sus medicamentos y tratar sus enfermedades con drogas psicodélicas luego de encontrar estudios que mostraban beneficios en la utilización de hongos alucinógenos y ácido lisérgico (LSD).
Días antes de ingresar al hospital, el hombre se preparó un té con hongos en agua hirviendo, lo coló con algodón y se lo inyectó de forma intravenosa. Poco tiempo después comenzó a vomitar sangre y sufrió síntomas tales como letargo, ictericia, diarrea y náuseas.
Al ingresar al área de cuidados intensivos del hospital, varios de sus órganos comenzaron a fallar, entre ellos los pulmones y los riñones.
Los estudios médicos demostraron que este personaje sufría una infección bacteriana y fúngica en la sangre. Los hongos que se había inyectado comenzaron a alimentarse y a crecer en su cuerpo.
Por tanto, permaneció ocho días internados en la terapia intensiva. Entre otras cosas, los médicos le administraron un tratamiento intensivo de antibióticos y antimicóticos. Y a pesar de que aún continúa tomando los antimicrobianos, finalmente se recuperó.
Quienes firmaron el informe, hallaron dos casos similares en otro del año 1985. En uno de ellos, otro hombre de 30 años enfermó con vómitos y más síntomas al inyectarse hongos por vía intravenosa, pero se recuperó después de recibir atención médica.
Es que, aunque los hongos de psilocibina hayan sido propuestos como tratamiento para la depresión y los trastornos derivados del uso de sustancias, su estado legal obliga a mucha gente a administrárselos por cuenta propia con escasa información pública.