Un fotógrafo herido en la movilización de los jubilados quedó al borde de la muerte

El reportero gráfico recibió el impacto de un cartucho de gas lacrimógeno que disparó la Policía Federal y debió ser intervenido quirúrgicamente en el Hospital Ramos Mejía.

El fotógrafo Pablo Grillo, uno de los tantos reporteros gráficos que ayer trabajaba en inmediaciones del Congreso, sufró el impacto de un cartucho de agas lacrimógeno que disparó la Policía Federal en medio de los incidentes.

Producto de la lesión, fue trasladado en grave estado al Hospital Ramos Mejía, en donde debió ser operado de urgencia. Desde el nosocomio indicaron que su estado es grave.

Grillo se encontraba a metros del edificio del Anexo del Senado, cuando en su afan por intentar capturar imágenes del momento de tensión, recibió el impacto del tubo de gas lacrimógeno y cayó al piso.

Fabián Grillo, padre del fotógrafo herido, declaró a la prensa que su hijo “estaba trabajando de forma independiente” cuando recibió el impacto y que tras ser asistido quedó en estado crítico.

Grillo, además de fotógrafo, es empleado del Concejo Deliberante de Lomas de Zamora.

La jornada de protestas de los jubilados, respaldada por barrabravas de distintos equipos de fútbol, tuvo lugar el miércoles por la tarde en el Congreso y terminó con fuertes enfrentamientos entre manifestantes y efectivos de seguridad. Según estimaciones del gobierno de la Ciudad, pasadas las 21, había 20 heridos y más de 150 detenidos.

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